Un Juzgado de Alicante ha ordenado la prisión provisional para un hombre de 32 años acusado de hurtar en varios domicilios de ancianos de Villena, a los que conseguía entrar haciéndose pasar por un vecino que pedía azúcar.
Según un comunicado de la Guardia Civil, este hombre, español, iba en todas las ocasiones bien vestido y era muy correcto en el trato, lo que evitaba que las víctimas llegaran a sospechar de sus intenciones.
El primero de los hurtos ocurrió el pasado Jueves Santo después de llamar al timbre de un matrimonio de ancianos que viven solos, e identificándose como un nuevo vecino.
Les pidió azúcar y aprovechó que le permitieron el acceso para hacerse con un reloj y unos pendientes de oro que se encontraban depositados encima de la mesa del salón, valorados en unos 900 euros.
Tras dar un rato de "agradable charla" a sus víctimas, este hombre salió de la casa sin que los ancianos sospecharan lo que acababa de suceder.
Un día después, en otro domicilio de Villena donde había una mujer de avanzada edad, logró sustraer por el mismo sistema 300 euros en efectivo que la vecina tenía dentro de una bolsita en el dormitorio.
Al igual que con las otras víctimas, esta mujer no se percató de lo ocurrido hasta que regresó a casa su marido, con quien buscó por toda la casa en busca del dinero.
La Guardia Civil estableció un dispositivo para la identificación y localización de este hombre, el cual condujo a la detención de J.V.B.R. el pasado jueves en la vecina localidad de Sax, acusado por un presunto delito y una falta de hurto.
Los agentes siguen investigando ante la posibilidad de que hayan podido existir otros afectados que no hayan denunciado.
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