Amorim aboga porque otros países participen en la solución de la polémica nuclear

Teherán.- El ministro brasileño de Asuntos Exteriores, Celso Amorim, se mostró hoy partidario que de otros países participen en la solución de la polémica nuclear que Irán mantiene con las principales potencias mundiales.

En un encuentro con las principales agencias internacionales de noticias destacadas en Teherán, el jefe de la diplomacia brasileña recordó que su país apuesta por cambios en el Consejo de Seguridad de la ONU, aunque precisó que no es un asunto que haya tratado con responsables iraníes.

"No he tenido una discusión reciente con las autoridades iraníes a este respecto, pero la postura es que el Consejo de Seguridad debe ser reformado. No existe razón alguna para mantener esta perversa identificación entre las potencias nucleares oficiales, las que se han reconocido como tales en el TNP y los miembros permanentes del Consejo de Seguridad", afirmó.

"¿Por qué el 5+1? Dejemos aparte, Brasil, ¿Por qué un país europeo puede entender mejor a Irán que Turquía? Parece que siempre ha sido que Occidente resuelve estos problemas, aceptamos a Rusia y China porque son miembros permanentes y tienen derecho a veto pero aparte de ellos, ningún otro. No creo que esto sea bueno", agregó.

Amorim se refería al llamado Grupo 5+1, que integran los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania y que lleva con Irán la negociación sobre su programa nuclear.

El ministro brasileño subrayó que la coyuntura económica ha cambiado y eso ha conducido a que hayan emergido otros actores con voz propia en el concierto de las naciones.

En las últimas semanas, Teherán ha emprendido una campaña en contra del Consejo de Seguridad, y en particular contra el derecho a veto, que anoche el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, calificó de "instrumento diabólico" de opresión.

Además, ha abogado por que el asunto nuclear sea abordado también por los otros diez miembros no permanentes del Consejo, entre los que se encuentran países como Turquía y Brasil.

"Creo que algunas veces son mejores los grupos pequeños. (Pero) no sé porqué esos grupos pequeños deben identificarse con el derecho a veto. Debe haber otros países, quizá Indonesia, quizá México, no lo sé", manifestó Amorim.