Arrestan a cinco policías en operación contra mafia de tragamonedas en Brasil

Río de Janeiro, 21 ago.- Cinco policías, cuatro exagentes y dos guardias carcelarios fueron arrestados hoy en una operación de las autoridades de Río de Janeiro contra una mafia que controla varias de las máquinas tragamonedas que operan ilegalmente en esta ciudad brasileña, informaron fuentes oficiales.

Los uniformados, entre los cuales un teniente coronel, figuran entre las 18 personas arrestadas en la mañana de este miércoles en la operación realizada por agentes del Grupo de Actuación Especial de Combate al Crimen Organizado (Gaeco) del Ministerio Público.

Los detenidos, de entre 26 personas contra las que fueron expedidas órdenes de captura, son acusadas de pertenecer a una organización que controla las tragaperras al mando del ya condenado banquero del juego ilegal, Fernando Iggnácio.

Las tragaperras, prohibidas en Brasil, se convirtieron en una de las actividades más lucrativas de los antiguos "bicheiros", como son conocidos en Brasil los banqueros del juego de apuestas ilegales del "bicho", varios de los cuales están presos bajo cargos de cometer diferentes crímenes.

Los cerca de 400 fiscales y policías que participaron en la llamada operación "Peligro Salvaje" también cumplieron con 76 órdenes de allanamiento en residencias, oficinas y locales comerciales en que las máquinas tragaperras eran almacenadas u operadas.

Las personas arrestadas en la operación serán procesadas por los crímenes de asociación para delinquir armada y corrupción activa y pasiva.

Según el Ministerio Público, la organización comandada por Fernando Iggnácio controlaba las máquinas de apuestas en la mayoría de los barrios de la zona oeste de Río de Janeiro.

El fiscal Decio Alonso, que comanda la operación, dijo que los policías y expolicías detenidos integraban el "brazo armado" de la organización criminal y actuaban como escoltas del "bicheiro".

"Ellos eran enviados a puntos sensibles, como depósitos, para proteger a los recaudadores (de los dineros procedentes de las apuestas)", afirmó Alonso.

El fiscal dijo igualmente que los policías eran los responsables por intimidar con sus armas a las personas que se negaban a pagar las apuestas o que tenían deudas con la organización.