Bruselas, 22 sep.- El viceprimer ministro de Bélgica y titular de Exteriores, Didier Reynders, ha condenado el asalto contra un centro comercial de Nairobi y subrayado su indignación por un suceso que ha causado 39 muertes y 150 heridos.
Reynders expresó su "tristeza e indignación por el violento asalto" con toma de rehenes ocurrido el sábado en el centro comercial de West Gate Mall de Nairobi.
Según publica hoy el diario Le Soir, cuatro ciudadanos belgas se encontraban en dicho centro comercial en el momento del ataque, protagonizado por un comando de islamistas radicales somalíes del grupo terrorista Al Shabab, que siguen atrincherados.
El ataque ha sido reivindicado por la milicia radical islámica somalí, que afirma haber matado a "más de cien" personas en represalia por la presencia de militares de Kenia en la misión de la ONU en Somalia.
El Ministerio belga de Exteriores indicó que los cuatro belgas que estaban en el centro comercial pudieron salir a salvo del mismo y que no tienen información de que otros conciudadanos, de los 500 que viven en el país africano, se hayan visto involucrados en el suceso.
Reynders envió también un mensaje de condolencias a las familias de las víctimas y a las autoridades de Kenia, donde su presidente, Uhuru Kenyatta, señaló que entre las víctimas mortales había familiares suyos.
En Nairobi, el ejército mantiene rodeado Westgate, uno de los centros comerciales más frecuentados por expatriados y la clase alta keniana.
Desde octubre de 2011, cuando el Ejército de Kenia entró en Somalia como respuesta a una oleada de secuestros supuestamente obra de Al Shabab en el vecino territorio keniano, los radicales islámicos amenazaron a Kenia con represalias por esa iniciativa.
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