Blanco se retira de la primera línea pero mantendrá su acta de diputado

José Blanco ha anunciado que abandonará la primera línea de la actividad política. El vicesecretario de Organización del PSOE ha explicado que ya informó en su día de esa decisión tanto a Zapatero como a Rubalcaba.Blanco dejará la "primera línea" de la política nacional tras el Congreso Federal que el partido celebrará en febrero y ha considerado que ahora es el momento de "abrir el paso a otra gente" dentro del partido que tenga "empuje" y "ganas".

Blanco ha defendido mantener su acta de diputado y lo ha desvinculado de la condición de aforado que le da para la investigación que está en curso por el 'Caso Campeón'. "Me he presentado a las elecciones, tengo que responder al compromiso con los electores que me han votado. En caso contrario estaría cometiendo un fraude con aquellos ciudadanos que me han confiado su voto", ha sostenido.

En este contexto, ha subrayado que abandonar la primera línea no significa abandonar la política y ha recordado que en el PSOE hay "muchos precedentes" de personas que tras haber ocupado puestos de responsabilidad ahora trabajan en el Congreso de los Diputados "con toda normalidad". Entre ellos, ha destacado el caso de Alfonso Guerra, quien también fue vicesecretario general de los socialistas entre 1979 y 1997.

Blanco ha accedido "excepcionalmente" a explicar su decisión de abandonar la primera línea y ha calificado como "sorprendente" que el anuncio haya causado sorpresa.

EL que ha sido el 'número dos' de Zapatero desde julio de 2000, ha explicado que le "parece que es normal" que no siga aspirando a ocupar ese cargo "del nuevo liderazgo que surja" del Congreso que tiene previsto celebrar el PSOE el próximo mes de febrero.

"Esto es lo normal y lo coherente, lo extraordinario sería lo contrario", ha sostenido antes de insistir en que la decisión "nada tiene que ver con otros asuntos".  

Proyecto sólido

Asimismo, el vicesecretario general del PSOE ha recalcado que el Congreso Federal de febrero tiene que servir al partido para perfilar un "proyecto sólido alternativo" y lograr un fuerte "liderazgo" con el objetivo de ganar las próximas elecciones generales dentro de cuatro años "o antes".

Blanco, que ha recordado que en él no va a votar en el Congreso al no ser delegado, ha enfatizado además que es "irrelevante" la opinión de los dirigentes socialistas sobre la elección del nuevo secretario general del partido porque lo importante en este cónclave es "la voz de los militantes".

En este sentido, ha recalcado que lo importante no es cuántos candidatos se presenten para encabezar el partido sino que del Congreso de febrero salga un "proyecto con solidez" y se logre el liderazgo y las condiciones necesarias "para poder volver a tener la confianza de los ciudadanos".