Cataluña. El gobierno definirá su respuesta al referéndum en función de la vía elegida por artur mas


El Gobierno de Mariano Rajoy definirá su respuesta al desafío soberanista planteado por la Generalitat de Cataluña en función de la vía por la que se oficialice ese desafío, incluido el posible referéndum sobre la independencia, según explican fuentes gubernamentales.
En el Gobierno no creen que la clave sea tanto el texto de la pregunta que puedan consensuar los partidarios de la consulta para formalizar esa pregunta a los ciudadanos de Cataluña, sino la vía que elijan para ello, por el diferente tratamiento que habría que dar a cada una de ellas.
La propia vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo públicamente tras la última reunión del Consejo de Ministros que el Gobierno iría paso a paso en función de las medidas que vaya tomando la Generalitat.
Esa es también la tesis que defiende el presidente, Mariano Rajoy, y que reiteró a los periodistas en una conversación informal durante el acto de homenaje a la Constitución en el Congreso de los Diputados.
Rajoy volvió a pedir que se imponga “el sentido común” y la “tranquilidad”, y reiteró la idea de que las decisiones se irán tomando en función de los pasos que se vayan dado desde Cataluña.
Desde el Gobierno precisan que son muchas las vías por las que Cataluña podría lanzar su reto soberanista, y podría pasar incluso como con el llamado `Plan Ibarretxe´, que murió después de ser derrotado en el Congreso de los Diputados, donde fue planteado como iniciativa parlamentaria.
La posibilidad de aplicar el artículo 155 de la Constitución y quitar competencias a la Generalitat sólo se comtempla en caso de que el presidente, Artur Mas, no acatara una resolución del Tribunal Constitucional contraria a la consulta previamente convocada.
No se aplicaría como un conflicto directo del Gobierno y la Generalitat, aseguran, sino como la única medida posible en caso de que el presidente Mas planteara un conflicto directo con el Tribunal Constitucional, al negarse a cumplir alguna de sus sentencias.
Precisan, además, que la aplicación de ese artículo no supondría irremediablemente la suspensión de la Generalitat, sino que podría utilizarse solo para instruir mandatos ejecutivos, por ejemplo a los responsables de la policía autonómica en caso de que estuviera siendo utilizada para materializar el desacato al Constitucional.

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