Colom reconoce deuda en seguridad pero sostiene que ha debilitado a Los Zetas

San Salvador, 8 sep.- El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, reconoció que la principal deuda de su saliente Gobierno es no haber logrado reducir la inseguridad, aunque resaltó que sí se ha "debilitado" el accionar en el país del sanguinario grupo mexicano Los Zetas.

En una extensa entrevista publicada hoy por El Diario de Hoy de El Salvador, Colom señaló que durante la campaña que lo llevó al poder en 2007 "midió mal" la magnitud de la criminalidad en su país, asolado por el narcotráfico y delincuentes conexos como los pandilleros.

Guatemala vive una espiral de violencia que, según cifras oficiales, produjo en 2010 unas 41,5 muertes por cada 100.000 habitantes, muy por encima de la media mundial de 8 homicidios por cada 100.000 habitantes, y de los 14,9 de Latinoamérica, de acuerdo a datos de la Organización de Estados Americanos (OEA).

"La parte más complicada, donde dejo más deuda, es la parte de seguridad. Yo hubiera querido que las cosas que estamos haciendo hoy, las hubiéramos hecho en 2009", dijo Colom.

El mandatario, de 60 años, también admitió que el combate al narcotráfico en Guatemala es "desigual" y ha llegado a una situación "límite", por la falta de recursos que afecta a las fuerzas.

"Cuando hacemos un operativo en un lugar tenemos que descuidar la seguridad de otras zonas porque no hay recursos. No tenemos la capacidad y los instrumentos para combatir a los narcos", lo cual lleva a una situación "límite", declaró.

Con México de por medio, Guatemala es la última frontera centroamericana con Estados Unidos, el mercado de la droga que grupos criminales internacionales trasiegan a través de la región dejando a su paso una estela de violencia y muerte que han convertido a Centroamérica en una de las zonas más peligrosas del mundo.

Pero el Gobierno ha tenido éxito en su empeño de "evitar que Los Zetas sigan ganando terreno" en Guatemala, y ha "debilitado" a esa organización al haber detenido "a 80 de sus cabecillas en los últimos meses", resaltó Colom.

Dijo tener "fe en que el nuevo Gobierno" emanado del proceso electoral que comenzará el próximo domingo "seguirá trabajando en la lucha" contra Los Zetas, al que, alertó, "no hay que verlo como un cartel de drogas sino que como un supermercado de violencia" porque "hacen de todo: secuestran, extorsionan, cuidan y venden drogas".

Colom habló de la penetración de Los Zetas en Centroamérica y dijo que para su combate "se debe crear una ley uniforme" en el llamado Triángulo Norte, integrado por Guatemala, Honduras y El Salvador, que respalde a "una comisión internacional contra el crimen organizado" que enfrente el problema.

El mandatario insistió además que "Europa y Estados Unidos, si en verdad quieren ayudar a la región, deben de controlar la venta de armas, el consumo de drogas químicas (en sus países) y hacer un esfuerzo común para el combate del lavado de dinero".

En la entrevista con el diario salvadoreño, Colom también expresó su preocupación por el "desbalance" que en las elecciones generales del próximo domingo en Guatemala, porque su partido, la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), carece de candidato presidencial.

La Justicia guatemalteca rechazó por ilegal la candidatura oficialista de Sandra Torres, exesposa de Colom, con el argumento de que se divorció en abril pasado para evadir la norma constitucional que impide a familiares cercanos del presidente en funciones aspirar al cargo.

"Yo siempre he sido respetuoso en la independencia de poderes. En el caso de Sandra yo he evitado dar comentarios. Lo que me preocupa es el desbalance político que se ha dado al no participar el partido oficial de la Presidencia", sostuvo Colom.

El candidato del derechista Partido Patriota, el general retirado Otto Pérez Molina, se perfila como el favorito de cara a los comicios, cuyo ganador asumirá la Presidencia de Guatemala el 14 de enero próximo.

Todas las encuestas coinciden en otorgar el triunfo a Molina, pero vaticinan una segunda vuelta electoral, que tendría lugar el 6 de noviembre, con el empresario Manuel Baldizón, segundo en los sondeos.