Girona, 12 mar.- La Audiencia de Girona ha condenado a siete años de cárcel a Antonio R., vecino de Blanes, por un delito de lesiones con instrumento peligroso al haber atacado a su expareja, de la que tenía una orden de alejamiento, con un destornillador y después haber incendiado su piso.
El fiscal solicitaba más de 46 años para el acusado, 11 por intento de asesinato, 15 por incendio y hasta 20 años por otros delitos de los que Antonio R. estaba acusado, agresión a dos hermanos de la víctima, quebrantamiento de condena, allanamiento de morada, daños, resistencia a agentes de la autoridad y amenazas.
Sin embargo la Audiencia de Girona ha rebajado la tentativa de asesinato a un delito de lesiones con instrumento peligroso, que conlleva una pena de tres años, tal y como reclamaba la defensa.
En cuanto al delito de incendio, el tribunal lo ha considerado un delito de daños con incendio y por ello le condenan a un año y ocho meses de cárcel.
La sentencia, que reconoce al imputado la atenuante de drogadicción, fija el global de la pena en siete años de cárcel.
Antonio R., vecino de Blanes de 39 años, estaba imputado por una docena de delitos a raíz de una agresión con un destornillador a su expareja, de la que tenía una orden de alejamiento, y de haber incendiado su piso el 27 de abril de 2010.
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