Condenan a varios opositores bielorrusos por disturbios postelectorales

Moscú.- Cinco opositores bielorrusos fueron condenados hoy a varios años de cárcel por participar en los violentos disturbios postelectorales del pasado 19 de diciembre.

El activista del "Frente Juvenil", Alexandr Kirkevich, y el coordinador de la campaña antigubernamental "Di la verdad", Pável Vinogradov, fueron sentenciados a cuatro años de prisión, según las agencias rusas.

Mientras, Dmitri Drozd, miembro del equipo de campaña del candidato presidencial, Andréi Sánnikov; Andréi Pratasenia, voluntario de la campaña de otro de los candidatos, y Vladímir Jomichenko recibieron tres años de cárcel como condena.

En todos los casos, los opositores fueron acusados de oponer resistencia armada a la autoridad y de alterar el orden público, según el artículo 293 del código penal bielorruso (disturbios masivos).

De esta forma, son ya once los opositores condenados a penas de cárcel desde que el pasado 1 de marzo comenzaran los juicios contra los participantes en las protestas antigubernamentales en la noche electoral.

Tres de los activistas que comparecieron antes los tribunales, entre ellos dos ciudadanos rusos, fueron liberados tras pagar una multa en metálico

Según la organización de derechos humanos Viasna (Primavera), una cuarentena de opositores, entre ellos cuatro candidatos presidenciales, Sánnikov, Statkévich, Nekliáev y Mijalevich, han sido acusados de tomar parte activa en la revuelta en la que miles de manifestantes contra el fraude intentaron asaltar la sede del Gobierno.

Por la represión violenta de la oposición, la Unión Europea aprobó en enero sanciones contra el régimen del presidente bielorruso Alexandr Lukashenko, considerado el último dictador de Europa y que fue reelegido con casi el 79 por ciento de los votos.

Lukashenko, presidente desde 1994, acusa a los servicios secretos de Alemania y Polonia de organizar junto a la oposición bielorrusa los violentos disturbios postelectorales con el fin de dar un golpe de Estado y arrebatarle el poder.