Washington, 23 abr.- Una agencia de espionaje del Pentágono afirmó hoy que, tras una alerta inicial, las autoridades no detectaron ricina en una base militar en Washington, aunque el Buró Federal de Investigaciones (FBI) realiza pruebas adicionales en un laboratorio.
El líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid, había alertado a la prensa de que se registró otro incidente con ricina en la Base Aérea Conjunta Anacostia-Bolling en el sureste de Washington, una semana después del envío de cartas con ricina al presidente de EE.UU., Barack Obama, a un juez estatal y al senador republicano, Roger Wicker, ambos de Misisipi.
La base militar inicialmente no pudo confirmar el presunto incidente.
Horas más tarde, un portavoz de una agencia de espionaje del Pentágono confirmó que las autoridades no encontraron ricina en la base militar.
"No se encontraron paquetes o cartas sospechosas", dijo en una declaración escrita un portavoz de la Agencia de Inteligencia de la Defensa (DIA, por su sigla en inglés), el teniente coronel Thomas Veale.
Veale explicó que el equipo que revisa la correspondencia en la DIA "alertó a las autoridades sobre la posible presencia de una sustancia potencialmente peligrosa".
Sin embargo, "tras una exhaustiva investigación sobre el terreno, no se encontraron paquetes o cartas sospechosos".
"El FBI tomó muestras y realizará más pruebas" en un laboratorio, agregó Veale, al asegurar que la DIA no hará más comentarios sobre la investigación en curso y toda pregunta al respecto deberá ser dirigida al FBI.
La semana pasada, las autoridades arrestaron a Paul Kevin Curtis, un imitador de Elvis Presley, en conexión con el envío de las cartas con ricina.
Las autoridades cancelaron el tercer día de una audiencia preliminar, y hoy retiraron los cargos contra Curtis y lo dejaron en libertad luego de que no se encontraran pruebas de ricina en su vivienda.
Curtis, arrestado el miércoles pasado en Corinth (Misisipi), dijo a los periodistas que ama a su país y que "jamás" haría algo para atentar contra la vida de Obama o cualquier otro funcionario estadounidense.
En una rueda de prensa, Curtis describió su confusión al ser interrogado sobre el incidente con la ricina: "Pensé que hablaban de arroz (rice, en inglés) y me dije: pero si ni siquiera como arroz".
Su abogada, Christi McCoy, había sugerido el lunes que a su cliente alguien le tendió una trampa, sin ofrecer más detalles.
Las autoridades continúan la investigación pero no han precisado qué nuevos datos han obtenido en conexión con el envío de la ricina, una sustancia tóxica que es mortal aún en pequeñas cantidades.
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