El ejército turco continuará luchando contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) y saldrá reforzado tras aplicarle una profunda reforma después del fallido golpe de Estado, afirmó el viernes el jefe de la diplomacia turca, Mevlut Cavusoglu.
El general estadounidense Joseph Votel, comandante de las operaciones del Pentágono en Oriente Medio, había dado a entender el jueves que la situación en Turquía podía afectar su papel en la coalición internacional contra los yihadistas.
Estas declaraciones son "ridículas" y "desafortunadas", declaró el ministro turco de Relaciones Exteriores en una reunión con la prensa extranjera en Ankara.
El ejército turco participa en la lucha contra el EI pero también combate de forma encarnizada la rebelión kurda del Partido de Trabajadores del Kurdistán.
Para Cavusoglu, poner en duda la capacidad del ejército turco para luchar contra estos grupos supone "una falta de conocimiento (...) o incluso de malas intenciones".
Turquía llevó a cabo el jueves una reforma radical de sus fuerzas armadas, después del intento de golpe de Estado del 15 de julio.
El gobierno destituyó a casi la mitad de sus generales, que se encuentran en detención provisional.
Cientos de oficiales también están detenidos. Están acusados de su presunta vinculación con el movimiento del predicador Fethullah Gülen, exiliado en Estados Unidos, y que para Ankara es el principal instigador del golpe.
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