El congreso tramita la recuperación del recurso previo al tc con la discrepancia sobre el estatuto de castilla-la mancha

El Congreso de los Diputados dio este martes el visto bueno a la tramitación de dos proposiciones de ley, una del PP y otra del PSOE, para iniciar la recuperación del recurso previo de inconstitucionalidad , con la única discrepancia de si aplicarlo o no a la reforma estatutaria de Castilla-La Mancha que se está tramitando.
La proposición del PP fue aprobada por 288 votos a favor, 42 en contra y 3 abstenciones, mientras que la del PSOE obtuvo los mismos apoyos, pero un voto más en contra y una abstención más.
En su intervención en defensa de su proposición, la portavoz socialista, Soraya Rodríguez, subrayó que ese recurso se eliminó por la utilización que Alianza Popular hizo de él a comienzos de los años ochenta para paralizar reformas políticas, lo que convirtió al Tribunal Constitucional en una “no deseable tercera Cámara legislativa” y un claro factor “distorsionador” del juego parlamentario.
Por ello, la recuperación se plantea ahora solo para los estatutos de autonomía, con el objetivo de evitar un efecto “devastador” como el que tuvo la sentencia contra el Estatuto de Cataluña años después de su aprobación y de ser refrendado por los ciudadanos en las urnas.
Ese “choque de legitimidades”, aseguró la portavoz socialista, tiene “mucho que ver” con la actual situación en Cataluña y la “desafección” de los ciudadanos de esa comunidad.
Soraya Rodríguez apeló a la responsabilidad y a la coherencia del PP para que el Estatuto de Castilla-La Mancha, actualmente en tramitación en el Congreso de los Diputados, sea el primero afectado por ese recurso previo y no sea, por el contrario, el único que “escapa”.
De lo contrario, advirtió, esa reforma que pretende solo facilitar “un pucherazo electoral” podría ser declarada inconstitucional a mitad de legislatura, generando un problema de legitimidad a quienes fueran elegidos en aplicación de la ley electoral resultante de esa reforma.
DESAFORTUNADA PROMESA
El portavoz del PP, Alfonso Alonso, no ahorró tampoco críticas a los socialistas en la defensa de su propia proposición, señalando la “desafortunada” promesa del entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de aceptar el Estatuto que llegara de Cataluña, como origen de todo lo que ocurrió después.
Cree que la recuperación de ese recurso no permite cambiar el pasado pero sí “reconciliarse” con él, y evita repetir errores “costosos”. En todo caso, considera “coyuntural” que la reforma de Castilla-La Mancha esté en tramitación y rechazó expresamente la petición del PSOE.
Joan Josep Nuet, de La Izquierda Plural, utilizó el turno en contra para alertar de que la estabilidad institucional se garantiza con flexibilidad, mientras que el inmovilismo solo genera conflicto.
Considera una “barbaridad” que la voluntad popular pueda ser enmendada, sobre todo por un Tribunal Constitucional que tiene “deficiencias” en cuanto a su elección y su funcionamiento, y es una mera garantía de control bipartidista.
Pidió, por ello, al PSOE que no se deje llevar por el PP, que utilizó al Constitucional como “ariete” contra la soberanía popular en Cataluña, y llamó a los socialistas a construir desde la izquierda “un discurso federal, autónomo de la derecha y con capacidad propia de proponer” una nueva idea de país basada en el federalismo y el respeto a la libertad de los pueblos.
Montse Surroca, de CiU, acogió con “simpatía” el intento de evitar frustraciones de los ciudadanos, pero alertó de que ese recurso previo no resuelve el conflicto ni lo evitará en el futuro, porque “parte del inmovilismo, de más de lo mismo”.
Denunció que el recurso previo no cierra la puerta al recurso posterior y, por tanto, al conflicto entre legitimidades, y alertó de la necesidad de dejar que el pueblo de Cataluña se exprese con libertad.
RAZONABLE
UPyD sí respaldó las proposiciones, según explicó Rosa Díez por considerar “razonable” el objetivo y por celebrar lo que considera una “rectificación” de los dos grandes partidos tras lo que ocurrió con el Estatuto de Cataluña.
El PNV lo ve como un mero “seguro más” para los grandes partidos ya que el Tribunal Constitucional “no tiene credibilidad” y reproduce el comportamiento ideológico en función de su elección. “No entendemos”, dijo Aitor Esteban, que el PSOE esté “a la cabeza de esta manifestación” mientras habla de federalismo.
También el portavoz de ERC, Alfred Bosch, acusó a los grandes partidos de querer “frenar” las urnas, y Rafael Larreina, de Amaiur, les reprochó que el único objetivo sea “plantar cara a su incapacidad de resolver un problema histórico”, como es el encaje de las naciones que existen dentro del Estado.