El debate de investidura se adelanta al 1 de marzo en España

López, también socialista, ha propuesto que "la intervención del candidato a presidente se produzca el día 1 por la tarde y que el conjunto del debate parlamentario y la votación se produciría el día 2", empezando por la mañana.

El presidente del Congreso justificó este cambio de fechas para permitir que, en el caso de fracasen todos los intentos para formar gobierno y se tengan que repetir las elecciones, éstas tengan lugar el domingo 26 de junio "y no un lunes".

Si el día 2, Sánchez no logra ser investido por mayoría absoluta, se produciría una segunda votación en la que sería necesaria sólo una mayoría simple (más votos a favor que en contra).

López adelantó que esta segunda votación tendría lugar el sábado 5 de marzo.

Si dos meses después de la primera votación, ningún candidato hubiese logrado ser investido, quedarían automáticamente convocadas elecciones que se celebrarían 54 días más tarde, es decir, el domingo 26 de junio.

Sánchez se encuentra inmerso en unas negociaciones contrarreloj con el partido liberal Ciudadanos por un lado, y la formación de izquierda radical Podemos, junto a otras pequeñas fuerzas progresistas por otro en busca de los apoyos para conseguir la investidura.

De llegar a un acuerdo sobre un programa de gobierno con una u otra formación, o incluso ambas, ha prometido someterlo a la comisión ejecutiva del partido y luego a sus militantes, por lo que tiene las horas contadas para negociar.

Los comicios del 20 de diciembre dejaron un Congreso de los Diputados muy fragmentado.

El conservador Partido Popular de Mariano Rajoy fue la fuerza más votada, pero perdió 67 de los 186 diputados que tenía desde 2011 y declinó la oferta del Rey de intentar formar gobierno por falta de apoyo.

El monarca hizo entonces el encargo el 2 de febrero a Sánchez, cuyo partido dispone de 89 diputados y que busca desde entonces los apoyos para lograr su investidura.

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