El féretro del cabo español fallecido en libano llega a la base de morón

El féretro del cabo Francisco Javier Soria Toledo, que falleció este miércoles en Líbano en el transcurso de un intercambio de disparos y lanzamiento de material explosivo entre Israel y el grupo terrorista Hezbolá, acaba de llegar a la Base de Morón de la Frontera (Sevilla).
Allí se le han rendido honores militares en presencia del ministro de Defensa, Pedro Morenés, por ser el primer punto de destino en el que ha pisado suelo español. Desde allí será trasladado en un helicóptero militar en dirección a Córdoba, donde se le practicará la autopsia.
Esta mañana el féretro del soldado español ha sido despedido por sus compañeros en una ceremonia íntima, en la que se ha entonado el himno 'La Muerte no es el final', en la base Miguel de Cervantes en Marjayun (Líbano).
El ministro presidirá el acto de recepción en el aeropuerto de Córdoba del féretro del soldado español, que llegará procedente de la base de Morón de la Frontera (Sevilla) tras ser repatriado desde Líbano.
Desde allí será trasladado a la Base de Cerro Muriano (Córdoba), sede de la Brigada Guzmán el Bueno X, unidad que forma parte del contingente español desplegado en Líbano.
Antes de partir hacia España sus compañeros de contingente en la base Miguel de Cervantes de Marjayun (Libano) le han despedido en una ceremonia íntima en la que se ha entonado el himno 'La Muerte no es el Final'.
El cabo Francisco Javier Soria Toledo, de 36 años, es natural de Málaga, estaba casado y esperaba su primer hijo. Estaba destinado en Líbano desde el pasado mes de noviembre. El Gobierno le concederá, a título póstumo, la Cruz al Mérito Militar con Distintivo Rojo al cabo.