El fiscal pide 23 años de cárcel para dos etarras por el atentado contra gorka landaburu


La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado sendas penas de 23 años de cárcel para los etarras Oskarbi Jauregi y Patxi Xabier Macazaga como presuntos autores del atentado mediante paquete-bomba perpetrado contra el periodista Gorka Landaburu el 15 de mayo de 2001.

El Ministerio Público sostiene que Jauregi y Macazaga, junto a la también etarra Ainhoa García Montero -a quien no afecta este procedimiento, fueron los terroristas que confeccionaron el cuaderno-bomba enviado al domicilio en Zarautz (Guipúzcoa) de Landaburu, que trabajaba como delegado en el País Vasco de la revista "Cambio 16".
El escrito remitido a la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, órgano que se encargará en breve de la celebración del juicio, asegura que los dos acusados, miembros del “comando Buruntza” de ETA, realizaron primero vigilancias sobre el domicilio del periodista y, posteriormente, utilizaron un piso franco en la localidad guipuzcoana de Zizurkil para elaborar el artefacto explosivo.
Los etarras vaciaron un cuadernillo de unos 20 centímetros de largo y colocaron en su interior una bomba de cerca de 100 gramos de explosivo Titadyn con un sistema-trampa diseñado para hacer explosión al abrirse. Los terroristas colocaron el dispositivo en el interior de un sobre en el que imprimieron el logo de la publicación editada por la asociación Elkarri, a la que Landaburu estaba suscrito.
El escrito de acusación de la Fiscalía sostiene que Macazaga entregó el paquete-bomba a Jauregi en el polideportivo de Villabona y que ésta, utilizando el vehículo de su padre, lo trasladó hasta Zarautz y lo depositó en el buzón del domicilio del periodista. El escolta de Landaburu recogió el correo en la noche del 14 de mayo.
HERIDAS DE GRAVEDAD
Fue en la mañana del día siguiente, sobre las 10.20 horas, cuando el delegado de "Cambio 16" procedió a abrir el correo en el despacho de su domicilio. La explosión le provocó heridas de gravedad que le han dejado secuelas.
ETA reivindicó el atentado a través de un comunicado publicado en el diario “Gara” el 26 de julio de 2001. La Fiscalía destaca como una de las principales pruebas contra los acusados una carpeta encontrada en el piso franco de Zizurkil en la que se encontraron las huellas dactilares de ambos y en la que estaba anotada la dirección de Landaburu así como el número de matrícula de su vehículo.
El escrito de acusación también subraya como indicio el documento incautado a los entonces máximos responsables del aparato militar de ETA Juan Antonio Olarra Guridi y Ainhoa Múgica y en el que Jauregi relata pormenorizadamente como llevaron a cabo el atentado contra Landaburu.
En base a estos hechos, el Ministerio Público atribuye a Jauregi y Macazaga delitos de asesinato terrorista en grado de tentativa y de tenencia y transporte de aparatos explosivos.
Además de los 23 años de cárcel, la Fiscalía pide que los acusados indemnicen con 347.850 euros a Landaburu, así como que se les imponga la prohibición de comunicarse o acercarse al periodista y a sus familiares.

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