El PCE cree que ahora se demostrará si la transición llegó al poder judicial

  • Madrid.- El secretario general del Partido Comunista (PCE), José Luis Centella, ha expresado su respaldo al juez Garzón y ha opinado que las acciones que se tomen contra él por investigar crímenes del franquismo son "una prueba de fuego" para comprobar si la transición democrática llegó también al poder judicial.

El PCE cree que ahora se demostrará si la transición llegó al poder judicial
El PCE cree que ahora se demostrará si la transición llegó al poder judicial

Madrid.- El secretario general del Partido Comunista (PCE), José Luis Centella, ha expresado su respaldo al juez Garzón y ha opinado que las acciones que se tomen contra él por investigar crímenes del franquismo son "una prueba de fuego" para comprobar si la transición democrática llegó también al poder judicial.

Durante una rueda de prensa, Centella se ha referido a las diligencias abiertas contra Baltasar Garzón por el magistrado del Tribunal Supremo Luciano Varela, a raíz de las querellas presentadas por Falange, Manos Limpias y Libertad e Identidad por haberse declarado competente para investigar los crímenes y desapariciones durante la Guerra Civil y la dictadura.

"Estamos ante una prueba de fuego para que se evidencie si la transición democrática llegó también al poder judicial", ha subrayado el líder del PCE, cuya formación se sumará a los actos de apoyo que se celebren en apoyo del juez de la Audiencia Nacional, como el convocado por UGT y CCOO para el próximo martes, 13 de abril.

Centella ha insistido en que no es comprensible el "ensañamiento" contra Garzón, como tampoco se puede entender que lo que es "normal" en otros países como Argentina -investigar crímenes de dictaduras pasadas- no lo sea en España.

Sería "paradójico", ha continuado, que "ni un sargento de los grises" haya sido juzgado pero sí vaya a serlo un juez que investiga sus delitos.

Ante esta circunstancia, el PCE participará en todos los actos que se convoquen para respaldar al magistrado de la Audiencia Nacional con el fin de evitar que sean precisamente los "grupos fascistas" los que "quieran saldar cuentas" de los crímenes del franquismo, delitos que, además, "no están por encima de ninguna ley".

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