El PSN aboga por hacer cálculos para decidir la jornada de los funcionarios

Pamplona, 3 ene.- El secretario general del PSN, Roberto Jiménez, ha comentado que el Gobierno de Navarra, del que es vicepresidente primero, tendrá que "hacer cálculos" antes de decidir si incrementa la jornada laboral de los funcionarios, aunque ha adelantado que no es una medida que le guste.

La jornada de los funcionarios forma parte de la medidas adoptadas por el Gobierno del PP, con las que Jiménez ha asegurado, en rueda de prensa, que "ideológicamente" no está de acuerdo. "Creo en la austeridad, pero no en la ruindad", ha enfatizado para asegurar también que lo que están haciendo los populares "es imposibilitar el crecimiento económico".

También ha calificado este primer recorte del Gobierno central como "una gran mentira electoral", derivada, entre otras razones, de su compromiso de no subir los impuestos y establecer un incremento en el IRPF ante el que Navarra "no puede ponerse de perfil" porque es de obligado cumplimiento para las comunidades autónomas, al igual que la renta de emancipación o la tasa de reposición de la función pública.

La que no es de obligado cumplimiento es la relativa al aumento de la jornada laboral de los funcionarios, que en Navarra supondría cincuenta minutos más semanales, y con la que Jiménez se ha mostrado disconforme, aunque ha indicado que antes de tomar una decisión tienen "que tener los números" y ha señalado que quiere ser "muy prudente" al respecto.

En cualquier caso, ha considerado que "lo que no se puede hacer es estar criminalizando permanentemente a los funcionarios de esta situación" y "haciéndosela pagar a ellos".

Respecto a la situación generada tras el cese de la actividad armada de ETA, ha precisado que el actual reto es "la búsqueda de la convivencia" porque todavía, a día de hoy, "no está resuelta en esta comunidad".

De todas formas, al referirse a la política penitenciaria, tras apoyar el acercamiento de los presos "siempre y cuando haya arrepentimiento", ha reconocido que "las cosas han cambiado" como consecuencia de "la victoria de la democracia sobre la indecencia del terrorismo" y eso supone, a su juicio, "tener que cambiar cosas". "Creo que el inmovilismo no es nada bueno", ha asegurado.