El PSOE presenta una hoja de ruta para contentar a Ciudadanos y a Podemos

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha logrado contentar, con un documento de apenas 53 páginas, que pretende ser la hoja de ruta de negociación del pacto de investidura, a Podemos y a Ciudadanos.

El documento ha sido bien recibido tanto por los dirigentes de la formación morada, como por los del partido naranja, pese que estos últimos reconocen que hay discrepancias, que sería posible limar en las próximas semanas.

Sánchez ha lanzado guiños a su derecha -en la que sitúa a Ciudadanos- y a su izquierda e incluso ha tenido un gesto importante con Izquierda Unida-Unidad Popular, apostar por una profunda reforma laboral.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, aseguró que el documento "se parece mucho" al programa con el que su formación se presentó a las elecciones generales y que, por lo tanto, "indica que será fácil" que puedan llegar a un acuerdo para formar un Ejecutivo de coalición "de progreso", tal y como pide el partido morado.

Por su parte, el portavoz adjunto de Ciudadanos en el Congreso, José Manuel Villegas, consideró que, pese que hay diferencias, "creemos que hay espacio para poder llegar a acuerdos". Durante esta semana C's revisará el documento y volverán reunirse la próxima. Villegas destacó que "no hay obstáculos insalvables para poder llegar a un acuerdo con el PSOE".Acuerdos y desacuerdos con C's

Los principales puntos de discrepancia con Ciudadanos tienen que ver con la reforma laboral que plantea el PSOE -que sustituiría a la del PP- y que defiende tres tipos de contratos, frente al contrato único de la formación naranja, y la reforma de la Constitución, que debería contar con el Partido Popular, y que debía concretar que aspectos deberían guiarla, como apunta Ciudadanos.

Ciudadanos comparte claramente con los socialistas las apuesta por garantizar la estabilidad presupuestaria y ambos son partidarios de negociar con la Comisión Europea una flexibilización del déficit para España.

También existe una clara sintonía en aspectos como la regeneración democrática y la lucha contra la corrupción, claves en el programa de Ciudadanos, o la reforma fiscal, acabar con las amnistías fiscales o impulsar una estrategia de lucha contra el fraude fiscal.

La propuesta socialista coincide plenamente con el programa de Ciudadanos en algunos aspectos, ya que incluye una ley de segunda oportunidad para autónomos y empresarios, un aumento de la inversión en I+D+i, un MIR educativo, la rebaja del IVA cultural -Ciudadanos propuso el 7% y el PSOE ofrece el 10%- o un pacto por la Educación.

Incluso en la propuesta del ingreso mínimo vital como prestación no contributiva socialista, hay posibilidad de acuerdo. Ciudadanos, que no es partidario y propone un complemento salarial, cree que puede haber un punto de encuentro.

También se pretende revisar la estructura de la diputaciones provinciales, frente a la insistencia de acabar con ellas de Ciudadanos. Esta iniciativa podría ser un guiño al Partido Nacionalista Vasco (PNV), que considera básicas para su comunidad estas instituciones.Guiños a Podemos

Mientras, desde la formación morada parecen sentirse todavía más cómodos con el documento de Sánchez, que incluye clarísimos guiños a Iglesias, que sigue enrocado en su no a una negociación que incluya a Rivera.

La agenda social y la regeneración democrática, que comparten con Ciudadanos, son los mayores puntos de confluencia entre Podemos y los socialistas para impulsar una "gobierno de progreso".

Sin embargo, los socialistas ni siquiera citan la posibilidad de celebrar un referéndum en Cataluña, como pretende Pablo Iglesias. Y no ahondan en su propuesta de solución para la crisis territorial, dada la gran disparidad de los partidos para abordarla. Si habla el documento socialista de un Estado Federal, algo que en cierta medida comparten los tres partidos.

Ese modelo federal defendido por Sánchez es similar al que propone Ciudadanos, aunque con diferencias. Los de Rivera quieren fijar un techo limitado de competencias autonómicas que evite "tensiones perjudiciales para la vida del Estado" y rechazan las "singularidades" autonómicas, que sí contemplan los socialistas. Proponen, además, la desaparición de los regímenes forales del País Vasco y Navarra.

Entre los guiños a la formación morada están reconocer nuevos derechos, como la muerte digna, aprobar la ley de libertad religiosa e impulsar la de Memoria Histórica. También propone eliminar los apartados más conflictivos de la Ley de Seguridad Ciudadana -como la prisión permanente revisable-, aunque no derogarla.

En el documento también se plantea una nueva Ley de partidos para que se regulen las primarias en los partidos para elegir candidatos -una iniciativa de Ciudadanos- y que los militantes tengan más participación.

También se plantea un plan de emergencia social -reclamado por Podemos e IU- y derogar la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) cuando se consensúe una alternativa. Se paralizará su implantación.