El Rey retoma su ronda de conversaciones con Iglesias y Rivera

Más allá de las advertencias de barones y vieja guardia, y de acusaciones cruzadas entre uno y otro partido, las cosas han cambiado más bien poco en lo que a la investidura se refiere. Sigue igual de incierta que hace una semana, cuando Felipe VI cerró la primera ronda de contactos con los representantes parlamentarios y ofreció a Rajoy ser el primero en formar gobierno. El presidente en funciones lo declinó entonces, entendiendo que el fracaso estaba asegurado. Ni PSOE estaba dispuesto a aceptar su oferta de una gran coalición, ni tampoco Ciudadanos a sumarle sus apoyos.

Desde entonces, Rajoy ha seguido insistiendo en que la gran coalición, PP-PSOE-Ciudadanos, es la única válida para España. No se ha movido un ápice en cuanto a negociaciones, que se realizan más a través de televisiones y periódicos que a puerta cerrada en los despachos. Tampoco para los socialistas, o quizás mejor, para Sánchez, el escenario se presenta más favorable: la propuesta de pacto de Iglesias sigue sonando a "chantaje" y los barones han remarcado las líneas rojas. Nada de Podemos, y también nada de independentistas. Ni por activa, con el sí, ni tampoco por pasiva, con la abstención.

Así, por tanto, socialistas y populares afrontan de nuevo sendos encuentros con el Rey con todas las incertidumbres. Eso será el martes. Antes, este lunes, Felipe VI se volverá a ver con Iglesias y con Rivera. No es previsible que el primero le traslade nada nuevo. La primera vez ya lo hizo con su propuesta de pacto sorpresa, que cogió al propio monarca desprevenido. El rey pudo escuchar entonces de primera mano el adelanto de la propuesta que, apenas una hora después, Iglesias trasladó en su rueda de prensa: un Ejecutivo "de cambio y progreso" con PSOE e IU, en el que él tendría reservada la vicepresidencia y su núcleo duro, alguno de los ministerios más relevantes.

El acuerdo incluía un plan de medidas para afrontar la situación de emergencia social y una propuesta más flexible sobre el referéndum en Cataluña: Iglesias invitó a Sánchez a explorar fórmulas alternativas para un "encaje" constitucional de la plurinacionalidad española.Ciudadanos se reserva un papel de mediador

También este lunes, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, acudirá a La Zarzuela. La postura del partido naranja es tajante en lo que respecta a apoyar un gobierno con Podemos: Sánchez recibirá en ese caso el "no" del partido, han insistido en las últimas horas sus dirigentes.La formación está dispuesta a asumir un papel de mediación para desencallar la "guerra fría" entre PP y PSOE, para lo que Rivera ya ha encargado el diseño de una comisión que dialogará con las ejecutivas de ambos partidos para tratar de llegar a acuerdos conjuntos. La base de un posible entendimiento de gobierno.

En su primer encuentro, el presidente de Ciudadanos trasladó ya a Felipe VI su intención de "desencallar el bloqueo institucional" y puso sus escaños a disposición de iniciar la legislatura. Su solución, insistió, es un pacto de Estado entre PP, PSOE y Ciudadanos. Rivera se presentó ante el monarca como un hombre de Estado, partidario del "diálogo", la "generosidad" y las cesiones para permitir gobernar.

En la cita, trasladó también al rey la necesidad de reformar la Constitución, una prioridad para su partido. No obstante, admitió también que no puede abrirse un debate "sin rumbo" sobre esa revisión y que debe trabajarse una propuesta "en serio". Rivera quiere que el Congreso cree una comisión en la que participen los partidos y expertos constitucionalistas para analizar la posible reforma tomando como base el informe al respecto que hizo en su momento el Consejo de Estado por encargo del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.