Emiliano Sala, la inspiración argentina del Nantes

Se ha ido convirtiendo poco a poco en una pieza importante del juego ofensivo del Nantes: el argentino Emiliano Sala es un jugador de evolución irregular, que lleva seis años en Francia y que espera poder aprovechar lo máximo posible su momento de inspiración.

Su actividad desbordando a lo largo de todo el ataque puede suscitar interrogantes y hasta incomprensión cuando no consigue éxito ante el arco rival. Durante mucho tiempo fue la eterna promesa del Burdeos, donde no terminó de despuntar y sólo podía destacar en las distintas cesiones.

"Corro mucho. Se puede pensar que estoy menos lúcido ante la portería, pero ese es mi juego. Me siento bien si corro, si toco muchos balones", explicó Sala recientemente.

Los hinchas del Nantes le recibieron el pasado año con cierta desconfianza, que se mantuvo durante gran parte de la primera vuelta, ya que el argentino llegaba desde el rival histórico, el Burdeos.

Detectado a los 15 años en su provincia natal de Santa Fe y llegado al filial del Burdeos en 2010, su recorrido ha ido despacio, demasiado despacio para algunos.

Sala conseguía sus mejores actuaciones en las etapas en préstamo, al Orleans (3ª categoría) y luego al Niort (2ª), donde sí destacó como goleador.

Fue decisivo además la pasada campaña en la permanencia del Caen en la élite.

A pesar de unos inicios en el Nantes algo pobres, nunca dudó.

"Como atacante, es evidente, espero el gol con impaciencia. Pero eso no me perturba mentalmente. En mi carrera he conseguido bastante goles, sé marcar", señaló justo antes de estrenar por fin su cuenta, contra el Gazelec Ajaccio en la 17ª jornada.

El Nantes nunca perdió los nervios con él. En el mercado de enero llegó a rechazar los 4 millones de euros ofrecidos por el Wolverhampton (2ª división inglesa), tres o cuatro veces más de lo que había costado unos meses antes. El propio Sala no era insensible a los cantos de sirena que procedían desde el otro lado del Canal de la Mancha.

"Sienta bien saber que hay equipos que te siguen, más en Inglaterra, aunque sea de la segunda división", afirmó el pasado domingo el jugador.

Pero a sus 25 años, Sala sólo se ve haciendo el nido entre los 'Canarios' del Nantes.

"Me he instalado aquí, estoy en Nantes y estoy bien. Vivo bien aquí", afirma el que ahora es la primera opción ofensiva del equipo.

Con 4 tantos y 2 asistencias de gol, Sala ha estado presente en las jugadas de tres cuartos de los goles del Nantes en los últimos ocho partidos de la Ligue 1.

Sus 6 dianas desde el principio de esta temporada -la mitad de cabeza, gracias a su 1,87 metros- le convierten en el máximo anotador del club.

Todavía hay margen para mejorar, pero por el momento Sala ha empezado a demostrar de qué es capaz. Fue así con su 'doblete' ante el Angers (2-0) el domingo: una carrera hasta superar al último defensor y un golpeo con el interior del pie ante el arquero para lograr el primero, antes de un control orientado con el muslo seguido de un disparo imparable para el segundo gol.

El Nantes, que visita el sábado al Lyon (4º), es sexto en la clasificación y busca un puesto en las competiciones europeas de la próxima temporada.