En octubre se juzgará el intento de secuestro al hijo de El Pocero

Toledo, 25 abr.- El próximo mes de octubre la Audiencia Provincial de Toledo acogerá el juicio por el intento de secuestro, a punta de pistola, de Francisco Hernando del Saz, hijo el constructor Paco El Pocero, promotor de la macrourbanización del Quiñón de Seseña (Toledo), y por el que pretendían cobrar treinta millones de rescate.

Así lo ha adelantado hoy durante la presentación de la Memoria Anual de la Fiscalía el fiscal jefe de Toledo, José Javier Polo Rodríguez, quien se ha limitado a señalar que en el procedimiento hay "cuatro o cinco acusados", aunque tampoco ha precisado los delitos por los que serán juzgados.

El intento de secuestro ocurrió el 25 de abril de 2008 cuando dos desconocidos intentaron secuestrar, a punta de pistola, a Hernando del Saz, que resultó herido en la cabeza por los golpes que le propinaron, según dijeron a Efe en su día fuentes cercanas al caso.

Los hechos tuvieron lugar a las 14:25 en la denominada rotonda del tanatorio de Seseña (Toledo) cuando un vehículo BMW interceptó el paso de Francisco Hernando del Saz y se apearon dos personas que trataron de sacar del coche por la fuerza a la víctima.

Los agresores le golpearon en la cabeza con una pistola y le produjeron una herida de la que luego tuvo que ser atendido por los servicios asistenciales tras zafarse del intento de secuestro.

Fuentes de la subdelegación del Gobierno en Toledo explicaron a Efe entonces que los dos individuos habían llegado en un coche cada uno, y que tras el frustrado intento de secuestro huyeron en uno de ellos y dejaron el otro abandonado.

Francisco Hernando tuvo que ser atendido de varias heridas en el consultorio de Seseña.

La Policía Nacional averiguó que los autores del intento de secuestro al hijo de "El Pocero" son los mismos que retuvieron durante varios días en junio de ese mismo año a un empresario gaditano en Almonte (Huelva).

Según la Policía, los delincuentes pretendían pedir un rescate de treinta millones de euros por el hijo del constructor y que para llevar a cabo el secuestro habían alquilado un chalé en la localidad madrileña de Perales del Río, en cuya bodega habían construido un zulo.

La investigación, realizada por el Grupo de Secuestros y Extorsiones de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central de la Policía Nacional, se inició tras la liberación en Almonte del empresario de Sanlúcar de Barrameda Rafael Ávila, que permaneció 16 días retenido.

Los agentes emprendieron una serie de averiguaciones para comprobar si los responsables de este hecho habían participado en otros secuestros, tal y como se desprendía de las pesquisas realizadas, y tras varias gestiones supieron que dos de los detenidos entonces, ahora en prisión, habían planificado también cometer el secuestro de Seseña. EFE.