Madrid, 15 jul.- El Gobierno ha expresado hoy "su más firme condena" por el ataque contra una misión conjunta de Naciones Unidas y la Unión Africana (UNAMID) en el que murieron siete "cascos azules" en la región sudanesa de Darfur y ha afirmado que "es imprescindible que este ataque no quede impune".
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación transmite sus condolencias a las familias de las víctimas "por su dolorosa pérdida", que hace extensivas al Gobierno de Tanzania -país de donde procedían los siete "cascos azules" fallecidos- y al personal de UNAMID, al tiempo que manifiesta sus mejores deseos para una pronta recuperación de los heridos.
El Ejecutivo reitera su apoyo a los esfuerzos de las Naciones Unidas y la Unión Africana en pro del restablecimiento de la paz en Darfur y hace un llamamiento a todas las partes para cooperar para poner fin a la situación actual de violencia y dar paso a un nuevo escenario en que todos los sectores del país se sientan incluidos.
"Es imprescindible que este ataque no quede impune por lo que el Gobierno exhorta a las autoridades de Sudán a tomar urgentemente las medidas necesarias para la identificación de los autores del ataque y su puesta a disposición de la justicia", afirma el comunicado.
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