La Guardia Civil, en el marco de la ‘Operación Summas’, ha detenido en Valencia a dos personas, y está investigando a una tercera, acusadas de delitos de estafa y contra la salud pública por estafar más de un millón de euros a más de 100 personas por falsos tratamientos para curar lesiones medulares.
Según informó la Guardia Civil, en los registros llevados a cabo en Valencia, se han intervenido dispositivos de almacenamiento de datos, así como diversos botes de cristal que albergaban sustancias liquidas. Estas sustancias eran administradas a los pacientes con el objetivo de realizar el supuesto trasplante de ciertas células obtenidas del propio paciente.
La operación comenzó a principios del 2017, cuando los agentes tuvieron conocimiento, por ciertas informaciones recibidas, sobre la existencia de una supuesta y novedosa terapia ofertada por un centro médico ubicado en la ciudad de Valencia para la cura de lesiones medulares. La terapia estaba compuesta por cuatro fases, comenzaba por el pago de 4.000 euros y seguía con abonos de más de 50.000 euros dirigidos a la recuperación.
Además, los agentes pudieron constatar que los tratamientos que realizaban consistían en masajes terapéuticos y administración de productos homeopáticos, a excepción de varios botes con sustancias liquidas que la Guardia Civil está analizando para determinar su composición. En el transcurso de la investigación, se han recabado diversos informes que supuestamente avalaban las perspectivas de curación que aparentemente se ofertaban y difundían los investigados, así como publicaciones en medios de comunicación, que carecían de evidencias evaluadas y control por las autoridades sanitarias españolas.
"Ahora o nunca"
Tal y como explicó la Guardia Civil, el elemento fundamental de la difusión y captación de las posibles víctimas se realizaba a través de la página web de la clínica, existiendo solamente la posibilidad de contacto con ellos a través del sistema de mensajería de dicha página. A pesar de que en la web se difundía de manera genérica las fases de la supuesta terapia, el secretismo y falta de claridad en lo ofertado hicieron sospechar a los investigadores y autoridades sanitarias de la verdadera finalidad de la terapia.
De este modo, con la promesa futura de una recuperación se influenciaba a las víctimas, muchas especialmente vulnerables debido a la situación de irreversibilidad de su lesión, para que hiciesen importantes desembolsos económicos para el sometimiento a la terapia con el fin de llegar a alcanzar esa mejora o curación que se difundía.
Asimismo, los detenidos advertían a los posibles pacientes que si no contrataban su servicio y dado que ellos eran los únicos que ofertaban ese tratamiento nunca volverían a atenderlos.
Además, los agentes han podido constatar que estos hechos, a pesar de estar produciéndose en la actualidad en Valencia, podrían abarcar un periodo más amplio ya que los responsables durante su estancia en la localidad de Elche estaban ofertando la misma terapia. Las diligencias han pasado ya a disposición del Juzgado número dos de Elche (Alicante).
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