Exteriores: "los diplomáticos lamentan los recortes pero no se quejan"

Madrid, 22 jul.- El subsecretario de Asuntos Exteriores, Rafael Mendívil, ha afirmado hoy que los miembros de la carrera diplomática lamentan los recortes presupuestarios como el resto de las áreas de la Administración, pero ha puntualizado que "no se quejan" al entender que se hace en favor de los intereses de España.

Mendívil, en una entrevista con Efe, ha destacado que el Ministerio de Exteriores, el departamento al que más se le ha reducido el presupuesto en 2012, está haciendo un esfuerzo "imaginativo" de ahorro sin generar un ambiente de rechazo entre su plantilla.

"No hay quejas, sí hay lamentos, porque se notan los recortes, naturalmente, pero lo que hay es una aceptación de los recortes porque se comprenden", ha argumentado el responsable de administrar las cuentas y la política de personal en Exteriores.

Ante el descontento creciente de los funcionarios del Estado por los ajustes presupuestarios y salariales, Mendívil ha ensalzado la actitud de los diplomáticos y de los otros empleados de Exteriores, también en comparación con épocas anteriores.

En su opinión, "hay un esfuerzo de búsqueda de ahorro imaginativo, de formas de racionalizar el uso de los recursos de la mejor manera posible". "Y produce una enorme satisfacción ver que contamos con el apoyo de todos los funcionarios tanto dentro como fuera", ha apostillado.

Mendívil, no obstante, ha elogiado el papel de todos los empleados públicos del Estado por su vocación "profunda y sentida" de servicio en favor del interés general.

El departamento que dirige José Manuel García-Margallo cuenta con una plantilla de 6.715 personas, de los que casi mil son diplomáticos y el resto funcionarios o contratados.

Su presupuesto para este año es de 1.493,2 millones de euros, un 54,4 por ciento menos que en 2011, lo que ha mermado principalmente las partidas de cooperación.

Mendívil ha puesto de relieve el papel que Exteriores puede desempeñar para contribuir a la salida de la crisis, potenciar la Marca España y ayudar a las empresas a obtener negocios fuera.

"Estamos en una situación complicada y una gran parte de la solución está en el exterior gracias a la exportación y a la presencia de empresas españolas en el extranjero. Por eso, queremos que las embajadas y consulados sirvan de pilar y soporte para las actividades comerciales", ha asegurado.

Ha recordado que los embajadores y cónsules, sobre todo en países donde no hay una oficina comercial, están recibiendo una formación específica para poder llevar a cabo esta tarea de asistencia a las compañías.

"Está cambiando la mentalidad", ha apuntado Mendívil, quien ha confiado en que este rol ayude a mejorar la imagen que la ciudadanía tiene del cuerpo diplomático.

A su entender, la opinión actual es "mala o regular". "No gozamos de un prestigio importante en la sociedad, en gran parte por desconocimiento, porque estamos lejos, porque hay una imagen estereotipada".

El subsecretario de Exteriores ha contrapuesto esta percepción con la que hay de los diplomáticos españoles en el mundo.

"Es francamente buena. Estamos entre las grandes diplomacias mundiales por su seriedad, eficacia y trabajo. No tenemos nada que envidiar a otros servicios diplomáticos como franceses, ingleses o italianos", se ha congratulado.

Mendívil ha hecho hincapié en el esfuerzo que se está haciendo para aproximar la realidad de la diplomacia española y del servicio exterior del Estado.

Ha confiado en que a esta meta contribuya la futura ley de acción exterior, que Exteriores quiere llevar al Congreso antes de fin de año después de haber fracasado en legislaturas anteriores.

El propósito de esta reforma legal es "establecer una coherencia y un trabajo conjunto" entre todos los actores que participan en la política de España en el exterior para que esta acción "sea más eficaz y dé una imagen de orden y unidad".