Fiesta nacional. La plataforma contra chávez enmarca el "desaire" de ayer en la "espiral de despropósitos" del gobierno venezolano

El presidente de la Plataforma contra Hugo Chávez, William Cárdenas, calificó hoy de "desaire" la ausencia de Venezuela en el desfile del Día de la Fiesta Nacional en Madrid y la enmarcó en la "espiral de despropósitos" que a su juicio está protagonizando el Gobierno venezolano en su relación con España desde que la Audiencia Nacional desenmascarara su relación con la banda terrorista ETA.
Según comentó a Servimedia, para Cárdenas "es normal" que ocurran estos "desencuentros" tras la revelación de los vínculos entre el Gobierno venezolano y ETA, a través de la persona de Arturo Cubillas, que hace "imposible" mantener unas "relaciones normales" con Caracas.
Para el portavoz de esta asociación de disidentes venezolanos en España, el Gobierno de Chávez "trata de mantenerse en su posición" y "no hay ningún signo de que quiera colaborar con la Justicia" española, en un caso en que esta plataforma está personada.
Si a todo ello se añade el hecho de que para el Gobierno bolivariano el 12 de octubre no es el Día de la Hispanidad, sino el de la Resistencia Indígena, Cárdenas concluye que "es normal" que Venezuela no desfile y opte por "inventar" una indisposición de su abanderado.
Además, este opositor venezolano atribuyó al "sentimiento de rechazo de la sociedad española", motivado por la colaboración del Gobierno con terroristas que "matan españoles", el que el embajador venezonalo, Julián Isaías Rodríguez, "desaparezca de la escena" y falte a la recepción de la Casa Real que siguió al desfile. "No se puede tener relaciones normales y a la vez proteger a terroristas", insistió.
Cárdenas considera que no le corresponde a él decir al Gobierno español cómo ha de enfrentarse a la situación con Venezuela, pero en su opinión hasta el momento ha sido "muy tibio".
Según recordó, la Convención de Ginebra otorga "muchos mecanismos" para mostrar una repulsa oficial, desde la declaración de persona non grata hasta la ruptura de relaciones diplomáticas.