San Fernando de Henares (Madrid), 29 may.- La Fiscalía Anticorrupción ha rechazado el acuerdo por el que los cuatro exdirectivos de Caixa Penedès buscaban evitar su ingreso en prisión devolviendo la cantidad que cobraron irregularmente en pensiones millonarias y ha mantenido su petición de entre 3 y 3,5 años de cárcel para ellos.
Así lo ha expuesto el fiscal Emilio Sánchez Ulled en la última sesión del juicio contra Ricard Pagès, Santiago Abella, Joan Caellas y Manuel Troyano, después de que estos hayan asegurado que han procedido al reintegro de 28,6 millones de euros de los 31,6 que se adjudicaron en pensiones con independencia de la decisión que tome el tribunal.
El fiscal les acusa de un delito de apropiación indebida y administración desleal, considera que Pagès, aprovechando su poder "omnímodo", diseñó una estrategia a largo plazo destinada a garantizarse él y sus más cercanos colaboradores, los otros acusados y el ya fallecido exdirector de Recursos Humanos Jaume Jorba, una "desproporcionada ganancia patrimonial" a costa de la entidad.
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