Barcelona, 26 feb.- El Gobierno catalán ha evidenciado su satisfacción por que el PSC apoye hoy en el Congreso la celebración de una consulta soberanista en Cataluña, un hecho al que atribuye una "dimensión histórica" ya que cree que no quedará en una "cuestión estética" sino que tendrá consecuencias en el futuro.
"Hoy plantaremos una semilla que germinará con fuerza. (...) Estoy seguro de que esto no es una cuestión estética por parte del PSC sino que tendrá recorrido en el futuro", ha dicho el portavoz del Govern, Francesc Homs, en rueda de prensa tras la reunión del Consell Executiu.
El ejecutivo catalán, tal como ya hizo ayer el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha acogido de muy buen grado el paso insólito que hoy dará el PSC en el Congreso, donde se desmarcará por primera vez de su "partido hermano", el PSOE, para votar a favor de dos propuestas de resolución que invitan al Gobierno a dialogar con la Generalitat sobre la celebración de una consulta soberanista.
El portavoz del Govern ha evitado hoy "meter el dedo en la llaga" y comentar la decisión de la exministra de Defensa Carme Chacón de no secundar esta tarde la votación de sus compañeros del PSC en el Congreso.
"Lo que vote un diputado en particular es una anécdota, nosotros no vamos a ahondar en las contradicciones evidentes del PSC. Lo importante es que su ejecutiva ha tomado una decisión por unanimidad y que se sume a la mayoría catalana que apuesta por la consulta", ha considerado Homs.
El portavoz del Govern sí ha querido hacer un matiz sobre el contenido de una de las propuestas de resolución sobre la consulta, la que presenta el grupo parlamentario de CiU, al precisar que este documento "no habla de una consulta acordada" con el Gobierno.
El texto que los nacionalistas han llevado al Congreso se limita a invitar al Gobierno a que dialogue con la Generalitat sobre la celebración de una consulta en Cataluña, pero no precisa ningún detalle más.
"Esta propuesta es fruto del acuerdo de legislatura entre CiU y ERC, que nos dimos este semestre para abrir una negociación con el Estado español, es por tanto parte del itinerario soberanista", ha explicado Homs.
CiU y ERC dan por hecho que el Gobierno no se avendrá a autorizar que Cataluña celebre una consulta de estas características, y por eso en paralelo elaboran la ley de consultas catalana en el Parlament, que en principio debería estar aprobada antes del verano.
El PSC, que votó en contra de la declaración de soberanía del Parlament hace un mes, esgrime que hoy debe apoyar las propuestas presentadas por CiU e ICV-EUiA en el Congreso ya que, a su juicio, se limitan a recoger un planteamiento que los socialistas catalanes llevaban en su programa electoral.
El partido de Pere Navarro defiende la celebración de una consulta soberanista en Cataluña pero con la condición de que ésta sea legal, vinculante y acordada con el Gobierno.
Este último extremo es el que más separa al PSC de CiU y ERC, que defienden la celebración de la consulta tanto si la autoriza el Estado como si esto no ocurre.
Quien se opone de manera frontal a cualquier fórmula para consultar a los catalanes sobre la independencia es el PSOE, que votará hoy en contra de las propuestas de CiU e ICV-EUiA que los diputados del PSC, salvo Carme Chacón, sí apoyarán.
De este modo, PSOE y PSC votarán hoy en el Congreso de manera diferente por primera vez en sus 35 años de historia compartida, en un momento de sonoras discrepancias entre las direcciones de ambos partidos.
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