Madrid, 21 oct.- El Gobierno ha aprobado hoy un real decreto que regula la cotización de los actuales becarios y de los que ejercieron esta actividad en el pasado, puesta al día que permitirá a la Seguridad Social ingresar unos 138 millones de euros al año según el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez.
Con esta norma los becarios dejarán de ser "precarios" según el portavoz del Gobierno y ministro de Fomento, José Blanco; mientras que para Gómez evitará el actual "abuso" que se hace de estas personas como sustitutos de otros trabajadores.
El real decreto permite, por primera vez, la posibilidad de cotizar a la Seguridad Social sin tener una relación laboral, ha destacado Gómez.
Bastará con que los jóvenes -que son los destinatarios principales de las becas, según Gómez- tengan algún tipo de remuneración para tener una relación de cotización con la Seguridad Social.
Así, las becas remuneradas vinculadas a estudios universitarios o de formación profesional de empresas, fundaciones o administraciones públicas se tendrán en cuenta a partir del 1 de noviembre para el cálculo de la pensión.
Para los que hayan tenido una beca antes de la entrada en vigor del real decreto la norma establece la posibilidad de que, de forma voluntaria, puedan firmar un convenio especial con la Seguridad Social y cotizar para que esos períodos sean tenidos en cuenta o "rescatados", en palabras de Valeriano Gómez.
De acuerdo con las cifras aportadas por el ministro, el que las empresas coticen por los becarios va a beneficiar a partir del uno de noviembre a 30.000 personas.
Deberán cotizar por cada uno de ellos unos 42 euros, mientras que a cargo del becario irán 6 euros.
Con esta fórmula la Seguridad Social ingresará al año unos 18 millones de euros.
En el caso de las personas que quieran rescatar sus becas, Valeriano Gómez ha indicado que los beneficiarios serán como mínimo unos 100.000, pero que pueden llegar a 200.000.
En este abanico el ministro también ha contemplado a los becarios actuales que quieran cotizar por los meses que habrán ejercido esa actividad antes del 1 de noviembre, así como a los englobados a partir de 2003 en el estatuto del becario de investigación.
El coste para todas ellas de firmar ese convenio especial con la Seguridad Social les supondrá unos 150 euros por cada mes que quieran que se "rescate" para el cómputo de las pensiones, ha detallado Gómez.
Esto supondrá unos ingresos de unos 120 millones de euros al año para la Seguridad Social.
El plazo para solicitar el rescate de las becas no cotizadas finaliza el 31 de diciembre de 2012.
Un día después entra en vigor la reforma de la Seguridad Social aprobada el 21 de julio de este año, que eleva, progresivamente (hasta 2027), la edad de jubilación de 65 a 67 años y aumenta de 15 a 25 años el periodo de cálculo de la pensión.
La reforma de las pensiones, que incluye esta nueva regulación de los becarios en su disposición adicional tercera, fue pactada con los sindicatos CCOO y UGT y las patronales CEOE y CEPYME.
Por esta razón, las valoraciones sindicales del real decreto han sido positivas.
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha opinado que el que se permita cotizar a los becarios es una necesidad para compensar a los jóvenes por las largas carreras de cotización que introduce la reforma de las pensiones.
UGT ha destacado que la medida es "fruto del empeño" de las organizaciones sindicales por otorgar la máxima protección social a un colectivo, fundamentalmente jóvenes, durante sus prácticas formativas en las empresas.
Respecto a la posibilidad de que las empresas reduzcan a partir de ahora la cuantía de las becas por tener que cotizar por ellas, el ministro de Trabajo ha indicado que es una "vieja discusión".
Al respecto, ha precisado que hay que regular mejor la situación de esos 30.000 becarios, porque no se puede "condenar al joven a perder años de cotización". EFE
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