La Policía desaloja coche a coche y con grúas y multas a los taxis de la Castellana

Los taxistas madrileños han cumplido este lunes una semana de huelga indefinida ocupando el Paseo de la Castellana. El recorrido entre la plaza de Colón y la glorieta de Gregorio Marañón ha amanecido cortado tras una 'vigilia' que han llevado a cabo unos 2.000 taxistas, en protesta por la regulación de las VTC. Una concentranción que no cuenta con la autorización pertinente de delegación de Gobierno, por lo que los antidisturbios han comenzado a desalojar a los taxistas para desbloquear la céntrica calle a partir de las siete de la mañana y han tardado algo más de tres horas en terminar. En esta operación se han vivido momentos de tensión y forcejeos con el colectivo que, una vez abandonado el Paseo se han trasladado hasta la calle Génova para protestar ante la sede del Partido Popular. 

Tras protagonizar agentes de Unidades de Intervención Policial (UIP) una formación para que los taxistas retrocedan a la altura de la glorieta de Gregorio Marañón hacia Colón, algunos taxistas han comenzado a retirar su vehículos que bloquean los laterales de la Castellana, aunque la ocupación seguía en los carriles centrales. Hasta este lugar se han desplazado decenas de grúas, para retirar coches, y los agentes municipales han empezado a multar, con hasta 200 euros, a los taxistas. Muchos de ellos han hecho una sentada junto a sus vehículos para evitar ser desalojados.

En estos episodios se han vivido momentos de tensión con forcejeos entre manifestantes y policía, si bien no se han producido cargas por parte de las fuerzas antidisturbios. En el entorno de la plaza de Emilio Castelar, según ha podido comprobar Efe, existe un importante despliegue de antidisturbios con hasta 40 furgones de la Unidad de Intervención Policial (UIP). Sobre las 8.30 horas se han vivido momentos de tensión entre taxistas y policías que les han pedido que retiren los vehículos. A esa hora, Efe también ha podido comprobar cómo varios taxistas, a instancias de la Policía, accedían a retirar sus coches de los carriles centrales de la Castellana, mientras que otro grupo obstaculizaba el paso de los antidisturbios. A las 10:20 se ha dado por terminado el desalojo, a la altura del Hotel Villa Magna.

Entretanto, en el lateral derecho del Paseo de la Castellana, en dirección Plaza de Castilla, frente a la plaza Margaret Thatcher, siete personas permanecen en huelga de hambre, junto a dos tiendas de campaña, y la Policía les ha dejado permanecer en el lugar, aunque en un principio intentó desalojarles. Los carriles laterales del Paseo de la Castellana han estado despejados en todo momento.

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Precisamente, a primera hora de este lunes el delegado de Gobierno en Madrid, José Manuel Rodríguez Uribes, ha asegurado que van a apoyar tanto al Ayuntamiento de Madrid como a la Policía Municipal, para "garantizar" la movilidad, el tráfico y los derechos de los ciudadanos. En referencia a la concentración sin autorización que mantienen los taxistas desde el sábado por la noche, Uribes ha indicado que "el legítimo derecho a la huelga no incluye el colapso de la ciudad" y ha añadido que el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, tiene que cumplir con su "obligación" y ponerse "A trabajar ya".

Garrido pedía este domingo al delegado, "que parece que está de vacaciones" que actuara ya para no mantener "secuestradas" las calles de Madrid y los ciudadanos. Ante esta petición, anoche Rodríguez Uribes decía que Garrido "debería ocuparse menos " de lo que deben hacer los demás y "más cumplir con la obligación de trabajar para regular el conflicto entre taxis y VTC". "Decía Goethe que si todos barriéramos la puerta de nuestra casa, el mundo estaría limpio", añadía el delegado tras la crítica de inacción lanzada por el Gobierno regional.

Poco después, Rodríguez Uribes ha explicado que "todos los factores" aconsejaban que el desalojo de los taxistas en el Paseo de la Castellana se hiciera esta mañana y no el domingo por la noche cuando ya se asentó la acampada en este punto de la capital. En declaraciones a Onda Cero, recogidas por Europa Press, Rodríguez Uribes ha detallado que ayer estuvieron reunidos con el Ayuntamiento de Madrid, Policía Municipal y Nacional para "diseñar el dispositivo con todas las garantías" y que decidieron que "el mejor momento" para desalojar era "la primera hora de la mañana" con la disponibilidad de las grúas, que están retirando los vehículos que se mantienen y no se marchan voluntariamente.

Junto a las grúas que han empezado a llevarse vehículos, hay una gran presencia policial y además un helicóptero que sobrevuela la zona. Los antidisturbios han formado un cordón para evitar que los taxistas avancen y los conductores son desviados por los carriles laterales. Sin embargo, los trabajadores del sector mantienen un tramo bloqueado. En los cruces de la céntrica calle también se mantienen tanto agentes de Policía Municipal como de Policía Nacional para garantizar el paso en estos puntos. 

Los taxistas cumplen este lunes su primera semana de huelga con la intención de "petar" Madrid ante la llegada de miles de compañeros de otras regiones que se sumarán a la acampada que han montado en el paseo de la Castellana en su protesta por la regulación de los vehículos de transporte con conductor (VTC). La circulación en la zona es posible por los carriles laterales, aunque en dirección norte ya se registran retenciones de tráfico.

El líder de élite taxi Barcelona, Alberto Álvarez alias Tito, ha explicado que los agentes "les quieren desalojar" y ha hecho un llamamiento a sus compañeros para que sigan acudiendo. En este sentido, las asociaciones están pidiendo a los concentrados que se reagrupe para dejar espacio a unos 300 coches procedentes del sur. Además de este concentración, que no cuenta con autorización de la delegación, los taxistas han convocado para este lunes dos manifestaciones, una frente a la sede del Partido Popular en la calle Génova y otra en la Puerta del Sol.