Integración y primarias en noviembre, promesas de los candidatos en el debate

  • Integración y unidad del PSOE en el congreso federal de finales de mes, así como primarias abiertas en noviembre han sido los principales compromisos de los tres candidatos a sustituir a Alfredo Pérez Rubalcaba en el único debate público celebrado entre ellos antes de la consulta del día 13.

Madrid, 7 jul.- Integración y unidad del PSOE en el congreso federal de finales de mes, así como primarias abiertas en noviembre han sido los principales compromisos de los tres candidatos a sustituir a Alfredo Pérez Rubalcaba en el único debate público celebrado entre ellos antes de la consulta del día 13.

Durante casi dos horas, Pedro Sánchez, Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias han expuesto sus propuestas para su partido y el país en un formato de diálogo abierto con 99 militantes, ante quienes han prometido mantener las primarias para elegir al candidato a la Moncloa el 30 de noviembre próximo.

Ha sido después de que Madina aprovechara su primera intervención para lanzar este órdago, lo que ha obligado a Sánchez a asegurar que él también lo hará, pese a que hace sólo unos días planteaba la conveniencia de dejar las primarias para después de las autonómicas y municipales de mayo de 2015.

Mientras Madina ha asegurado que si no es elegido secretario general tampoco se presentará luego a las primarias, Tapias ha insistido en que si es el nuevo líder no optará a la Presidencia del Gobierno y Sánchez no ha avanzado qué intenciones tiene si no gana el congreso.

En lo que sí coinciden los tres es en la necesidad de trabajar para la integración en el congreso de finales de mes y que el PSOE no salga de esa cita dividido, como pasó -a juicio de los tres- en el cónclave federal de febrero de 2012, en el que Rubalcaba se impuso a Chacón por 22 votos.

Sánchez ha sido el primero en ofrecer a sus dos oponentes que formen parte de la próxima Ejecutiva Federal si resulta elegido, un guante que los otros dos han recogido, partiendo del convencimiento de que el PSOE debe caminar hacia la unidad y la fortaleza.

Un primer paso, en opinión de los candidatos, para intentar ganar los comicios municipales y autonómicos de mayo, en los que han prometido volcarse, Madina incluso al mismo nivel que en las elecciones de 1982.

A partir de ahí, los aspirantes han expuesto sus ideas para renovar el PSOE, que pasan por acabar con las donaciones privadas superiores a 2.000 euros en el partido y en sus fundaciones, ofrecida por Sánchez; limitar los mandatos a dos legislaturas de Madina, o que el 40 por ciento de los órganos de deliberación y decisión del partido no esté en manos de cargos públicos de Pérez Tapias.

En un debate que Sánchez ha salpicado de alusiones a Podemos, el diputado madrileño ha comenzado su primera intervención defendiendo que su partido "no está formado por casta, sino por gente de casta".

Poco después, ha reivindicado a "Pablo Iglesias, el bueno", cuando ha apelado a la "ejemplaridad" del fundador del PSOE para comprometerse a "cerrar las puertas giratorias" a los exgobernantes socialistas.

Con un discurso de más matices que Sánchez, Madina ha defendido que esto hay que hacerlo "con la temperatura legislativa adecuada para no condenar a nadie a la muerte laboral", mientras que Pérez Tapias ha sido tajante: "Hay que cerrarlas, porque no son éticamente defendibles, ni políticamente justificables y estéticamente son feísimas, dañan a la vista, es escandaloso ver el listado de personas que la cruzan".

Aunque durante el debate Madina ha reflejado una mayor complicidad con Tapias que con Sánchez -con quien ha cruzado críticas veladas-, el representante de Izquierda Socialista no ha perdido la oportunidad de diferenciarse de sus compañeros en casi todos los puntos.

Cuando Madina ha propuesto "cerrar" el Senado, si no se consigue llevar a cabo su reforma, Tapias ha replicado que España "no puede prescindir" de una cámara territorial y que "debe existir, la cuestión es que funcione bien", ha concedido.

También han hablado sobre corrupción y Sánchez y Madina han defendido la actuación del PSOE-A en el caso de los ERE, mientras que Tapias ha echado en falta la asunción de responsabilidades políticas.

Pérez Tapias, además, cree que los cargos orgánicos deberían dimitir si son imputados, aunque luego puedan volver "por la puerta grande" si no llegan a juicio o son absueltos, en tanto que Madina y Sánchez han situado el momento procesal para asumir responsabilidades en la apertura de juicio oral.

Se ha diferenciado asimismo el candidato de IS en el debate entre monarquía y república, habida cuenta de que él es partidario de hacer un referéndum a la ciudadanía y los otros dos no creen que sea una prioridad.

Otra diferencia ha sido en el debate catalán, donde Pérez Tapias apuesta por una consulta no vinculante a los catalanes y por reformular el sistema territorial en términos de "Estado plurinacional", y Sánchez y Madina no se han salido de la reforma constitucional para avanzar hacia un modelo federal contemplada en la Declaración de Granada del PSOE.

Más allá del partido, los aspirantes a dirigirlo han tenido ocasión de dar pinceladas de cuáles serían las principales medidas si llegasen a la Moncloa, en una suerte de "programa electoral" que incluye el fin de todos los aforamientos o elaborar una ley de muerte digna, tal y como propone Sánchez, o aprobar una ley de autonomía financiera de las administraciones locales que quiere Madina.

Como Pérez Tapias descarta presentarse a la Moncloa si es elegido secretario general, sus reclamaciones iban dirigidas a sus compañeros, la principal que recompongan las relaciones con la izquierda.

Y como también ha habido autocrítica en el debate, cada candidato ha señalado los principales errores del PSOE, entre ellos la reforma fiscal de Zapatero o el indulto al banquero Alfredo Sáenz (Sánchez); las cajas de ahorro politizadas o no haber derogado el Concordato (Madina), y reformar el artículo 135 de la Constitución (Pérez Tapias). EFE

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