"Estamos muy preocupados por la violencia y un probable empeoramiento de la situación que podría quedar fuera de control", dijo Kerry a periodistas en Boston, tras regresar de Jerusalén donde se reunió con líderes de ambas partes.
"Durante los últimos meses hemos alentado a ambas partes a dar pasos afirmativos para reducir las tensiones y demostrar un compromiso genuino con una solución de dos estados", dijo Kerry.
"Creo que podemos estar llegando a un punto central donde ambas partes tienen que tomar decisiones importantes para el futuro y obviamente esperamos que estas decisiones que se adopten hagan avanzar la perspectiva de una paz duradera", añadió.
Kerry se reunió el martes con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y el presidente palestino Mahmud Abas en Jerusalén y Ramalá para instarlos a calmar las tensiones tras una ola de disturbios.
Sin embargo, en estas reuniones no se lograron avances concretos y Kerry señaló que continuará presionando a ambas partes para tratar de lograr un compromiso en las próximas semanas.
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