Kiev estrecha el cerco en torno a las plazas fuertes de rebeldes prorrusos

Boris Klimenko

Kiev, 3 ago.- Las fuerzas gubernamentales ucranianas estrecharon hoy el cerco en torno a las plazas fuertes de los rebeldes prorrusos, que se resisten a ceder sus posiciones en la zona donde tuvo lugar la tragedia del avión malasio.

"Las Fuerzas Aéreas ucranianas causan pánico en las filas de los guerrilleros y terroristas en el Donbass (...), a pesar del uso del armamento pesado antiaéreo que recibieron del extranjero", aseguró hoy el presidente ucraniano, Petró Poroshenko, en su arenga a las tropas.

Según el Consejo Nacional de Seguridad y Defensa, los soldados, la Guardia Nacional y los voluntarios han reconquistado ya tres cuartas partes de territorio en las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk.

"Durante la operación antiterrorista el territorio ocupado por los terroristas se ha reducido en tres cuartas partes", dijo Andréi Lisenko, portavoz del Consejo, en rueda de prensa.

Lisenko subrayó que Kiev "dispone de suficientes armas y munición" para derrotar a los rebeldes,justo después de que esta semana la Unión Europea levantara el embargo a la exportación de equipos y tecnología militar a Ucrania.

No obstante, Poroshenko aseguró, tras asumir el cargo a finales de mayo, que la operación en el este de Ucrania "no puede durar dos o tres meses", y van ya tres meses y medio de ofensiva, en la que el Ejército ucraniano ha sufrido unas 400 bajas.

De hecho, según informaron hoy los insurgentes y a falta de confirmación oficial, los milicianos han derribado un nuevo caza ucraniano Su-25 sin que se sepa la suerte del piloto, con lo que ya son tres los aviones de esa clase abatidos en los últimos diez días.

Las fuerzas gubernamentales han centrado sus esfuerzos en cercar la ciudad de Donetsk, al igual que ya hicieran con Lugansk, y en hacerse con el control de la zona donde cayó el Boeing-777 de Malysian Airlines con 298 personas abordo.

Como en anteriores jornadas, las fuerzas gubernamentales tomaron localidades aledañas como Marinka y Alexandrovka, pero fueron expulsados poco después por los milicianos prorrusos, que dijeron haber destruido cuatro blindados ucranianos.

La clave para sitiar Donetsk, especialmente desde el punto de vista de la moral de los rebeldes, es acabar con los focos de resistencia en la localidad de Górlovka, el más irreductible bastión prorruso.

Cruentos combates estallaron también hoy a varios kilómetros de donde se estrelló el avión malasio, según informaron los rebeldes prorrusos, que dicen haber repelido la ofensiva de las fuerzas leales a Kiev.

Tropas regulares ucranianas iniciaron hoy un ataque masivo contra las posiciones insurgentes en la localidad de Orlovo-Ivánovka, que se encuentra a escasos 4 kilómetros de Rasipnoye, donde yace desde el 17 de julio el morro del aparato malasio.

Según una fuente de los rebeldes, la ofensiva contaba con 25 tanques, numerosos blindados y fuego de artillería, pero los sublevados lograron destruir tres tanques, cuatro blindados y un camión de transporte.

"Éstas desproporcionadas pérdidas se explican porque el enemigo envía a luchar a tripulaciones mal adiestradas bajo las órdenes de comandantes analfabetos", explicó la fuente a las agencias rusas.

En su opinión, los oficiales ucranianos "confían ciegamente en su superioridad en número y técnica, cuando los rebeldes ya tienen mucha experiencia en el combate contra los transportes blindados enemigos".

Las fuerzas gubernamentales también lanzaron una nueva ofensiva contra Shajtiorsk, la capital de la cuenca hullera local, pero no pudieron superar la defensa rebelde.

Al parecer, según la fuente, los guerrilleros habrían destruido tres blindados y dos piezas de artillería móviles, además de varias posiciones con morteros.

"Pese a sufrir enormes pérdidas, ya van varios días que los enemigos continúan obstinadamente atacando nuestras posiciones de defensa", apunto la fuente rebelde prorrusa.

Mientras, los forenses holandeses y australianos regresaron hoy al lugar donde cayó el avión para proseguir con su ardua labor de búsqueda de restos humanos, algunos de los cuales ya han sido trasladados esta madrugada a la ciudad de Járkov para su repatriación a Holanda.

"La prioridad es encontrar y repatriar los restos de las víctimas y sus objetos personales", aseguró Pieter-Jaap Aalbersberg, jefe de la misión internacional, en rueda de prensa en la ciudad de Járkov.

Entonces, agregó, "pasaremos a la búsqueda de los restos del avión (...), pero en estos momentos nos centraremos en la recogida de restos humanos", según informó Interfax-Ucrania.

"Las actividades de búsqueda transcurren en una zona de conflicto. Dependemos de los acuerdos sobre alto el fuego (...), estamos hablando no de días, sino de semanas", resaltó.