La ANP condena la construcción de 227 nuevas viviendas en territorio ocupado

Jerusalén.- La Presidencia de la Autoridad Nacional Palestina condenó hoy "enérgicamente" el anuncio israelí de la construcción de 227 nuevas viviendas en el asentamiento judío de Ariel, en el territorio ocupado de Cisjordania.

En declaraciones a la agencia oficial de la ANP, "Wafa", el portavoz presidencial, Nabil Abu Rudeina, consideró la decisión un "intento israelí de destruir lo que queda de cualquier esfuerzo por reanudar el proceso de paz", paralizado desde hace casi un año.

"Estas prácticas son un motivo poderoso para ir a Naciones Unidas para buscar el ingreso del Estado de Palestina y poner fin a estas acciones de Israel", dijo Abu Rudeina.

Por su parte, el movimiento islamista Hamás, que controla Gaza, aseguró en un comunicado que la decisión "reafirma el fracaso" de la opción del diálogo de paz con Israel y "la importancia de revisar la estrategia nacional del pueblo palestino sobre la base de adherirse a la opción de la resistencia".

El Ministerio israelí de Defensa indicó esta mañana en un comunicado que su titular, Ehud Barak, aprobó la pasada semana la comercialización de 227 unidades de vivienda en Ariel, de las que cien estarán destinadas a la comunidad evacuada de Netzarim, asentamiento de Gaza desmantelado en 2005.

El anuncio tiene lugar días después de que la comunidad internacional, y en especial la Unión Europea y Estados Unidos, condenaran las últimas aprobaciones de permisos para la construcción de colonias en el territorio palestino ocupado de Jerusalén Este.

La pasada semana se conoció el visto bueno por parte del Ministerio del Interior de planes para levantar 1.600 viviendas en la colonia judía de Ramat Shlomo y, a principios de mes, se dio también luz verde a la edificación de 930 casas en Har Homa, ambos en el Jerusalén palestino.

Los medios locales también informaron de la futura construcción de otras seiscientas casas en Pisgat Zeev y dos mil más en Givat Hamatos, también en Jerusalén Este, que los palestinos aspiran a declarar la capital de su Estado.

El asentamiento de Ariel, en el que viven más de 17.000 colonos, está en el distrito palestino de Salfit, al sur de Nablus, y fue construido sobre tierras expropiadas por Israel en 1978 "bajo el falso pretexto de necesidades militares", según la ONG israelí Betselem.

"El Gobierno echa más leña al fuego del próximo septiembre", mes en que los palestinos pretenden que la ONU reconozca a Palestina como estado independiente, y "abusa de la crisis de la vivienda en Israel para expandir los asentamientos", declaró a Efe Hagit Ofran, directora del departamento de Seguimiento de los Asentamientos en la ONG israelí "Shalom Ajsav" (Paz Ahora).

Ofran remarcó que "la construcción de casas en Ariel no tiene nada que ver con el problema de vivienda en Israel porque la mayoría de los israelíes no quieren vivir en asentamientos y nunca vivirán allí" y recordó que "los colonos son menos del 5 por ciento de la población israelí".