La Audiencia Nacional ordena detener al abogado de Sadam Husein, dado de alta

  • Palma.- La Audiencia Nacional ha ordenado de nuevo la detención de Giovanni di Stefano, el abogado italiano que defendió al dictador iraquí Sadam Husein, tras recibir el alta del hospital de Son Espases en el que se encontraba ingresado convaleciente de una operación, informaron a Efe fuentes jurídicas.

Palma.- La Audiencia Nacional ha ordenado de nuevo la detención de Giovanni di Stefano, el abogado italiano que defendió al dictador iraquí Sadam Husein, tras recibir el alta del hospital de Son Espases en el que se encontraba ingresado convaleciente de una operación, informaron a Efe fuentes jurídicas.

Di Stefano fue detenido el pasado lunes en Palma en virtud de un requerimiento internacional del Reino Unido que acusa al letrado de 18 delitos, entre ellos estafar a sus clientes entre 2004 y 2009 cuando, al parecer, no estaba acreditado para ejercer la abogacía en ese país.

La Audiencia decretó el martes por la noche su libertad por motivos de salud después de que su abogado, Jaime Campaner, así lo solicitara, y hoy ha vuelto a ordenar su detención antes de salir del hospital, una decisión que el letrado recurrirá.

El conocido como "abogado del diablo", que también defendió al expresidente serbio Slobodan Milosevic y al criminal estadounidense Charles Manson, se encontraba en su casa de la urbanización de lujo Son Vida, en Palma cuando fue arrestado por la policía española la noche del lunes.

Di Stefano quedará detenido a la espera de ser trasladado a Madrid para comparecer ante la Audiencia, que llevará a cabo el proceso de extradición.

Los hechos por los que la policía buscaba al fugitivo se remontan, según la policía, al periodo comprendido entre los años 2004 y 2009, cuando obtuvo importantes sumas de dinero tras presentarse como abogado en Reino Unido sin estar acreditado para ejercer como tal.

La policía indica que en una ocasión el abogado italiano, de 55 años, fue contratado por la esposa de un condenado a cadena perpetua y cobró 120.000 libras por una apelación que nunca llevó a cabo.

Durante su declaración el pasado martes ante la policía española, el letrado declaró que su detención tiene una motivación "política", después de que abogara por encausar al exprimer ministro británico Tony Blair por la guerra de Irak.

Mostrar comentarios