La comunidad turca en Alemania denuncia la falta de autocrítica de la policía

  • La comunidad turca en Alemania denunció hoy la falta de autocrítica de las fuerzas de seguridad del país, que durante una década ignoraron la existencia de una célula terrorista neonazi que asesinó a diez personas, ocho de ellas turcas.

Berlín, 31 mar.- La comunidad turca en Alemania denunció hoy la falta de autocrítica de las fuerzas de seguridad del país, que durante una década ignoraron la existencia de una célula terrorista neonazi que asesinó a diez personas, ocho de ellas turcas.

En el discurso inaugural del congreso federal de las Comunidades Turcas de Alemania (TGD), su presidente, Kenan Kolat, calificó de "incomprensible" que el grupo terrorista Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU) "durante más de diez años pudiese ejercer libremente la violencia" escapando al escrutinio policial.

"Hasta hoy no he oído que un funcionario de seguridad o un policía haya sido suspendido de servicio, que alguien haya sido desplazado (de su puesto de trabajo), que un político haya dimitido", criticó Kolat.

El congreso de la TGD, que lleva este año como lema "Mano a mano contra el racismo", contó a lo largo del día con la participación, entre otros, de Klaus Wowereit, alcalde de Berlín, y Cornelia Pieper, secretaria de Estado en el Ministerio de Asuntos Exteriores.

La célula neonazi NSU, formada por al menos tres alemanes, asesinó entre 2000 y 2007 a diez personas -ocho turcos, un griego y una agente de policía de nacionalidad alemana- sin que la policía sospechara de su existencia y achacara la mayoría de las muertes a disputas mafiosas o familiares.

No obstante, los terroristas, que colocaron además varias bombas y sobrevivieron atracando bancos, no fueron detectados por las fuerzas de seguridad hasta que el pasado noviembre dos de ellos, Uwe Böhnhard y Uwe Mundlos, se suicidaron en Eisenach (este de Alemania).

A continuación, la tercera integrante de la célula terrorista, Beate Zschäpe, se entregó a la policía tras volar por los aires la vivienda de Zwickau (este), que servía de refugio y base de operaciones al trío, y permanece desde entonces en prisión preventiva.

Posteriormente, las fuerzas de seguridad alemanas han detenido en diversas ciudades del país a al menos cuatro colaboradores de la NSU.

Este error policial, que "carece de precedente" en Alemania, según destacó la canciller Angela Merkel en un acto de homenaje a las víctimas de la NSU, ha generado una fuerte controversia en el país.

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