La fiscal rebaja la petición de prisión para el etarra "Einstein" de 25 a 23 años

  • Madrid.- La fiscal de la Audiencia Nacional Lola Delgado ha rebajado hoy su petición de 25 a 23 años de prisión para el etarra Ignacio Pedro Santesteban Goicoechea, "Einstein", al que acusa de los delitos de pertenencia, depósito de armas y tenencia de explosivos.

Madrid.- La fiscal de la Audiencia Nacional Lola Delgado ha rebajado hoy su petición de 25 a 23 años de prisión para el etarra Ignacio Pedro Santesteban Goicoechea, "Einstein", al que acusa de los delitos de pertenencia, depósito de armas y tenencia de explosivos.

Durante el juicio que se ha celebrado hoy en este tribunal, la representante del Ministerio Público ha retirado de su acusación los delitos de utilización ilegítima y de sustitución de la placa de matrícula del vehículo -por el que pedía dos años de prisión- porque no ha podido acreditarse durante la vista.

Sí ha mantenido el resto de delitos y ha añadido subsidiariamente al de pertenencia el de colaboración con banda armada porque, según ha explicado, la huella encontrada en la cinta adhesiva que rodeaba los explosivos hallados en el coche es una prueba que, por sí misma, "podría ser ya incriminatoria".

Inicialmente, la fiscal consideraba que el acusado robó en febrero de 1992, junto a los etarras José Gabriel Zabala y Gonzalo Rodríguez Cordero -que ya han sido juzgados por estos hechos-, un coche en San Sebastián y los tres lo trasladaron a una lonja del barrio de Iturrioz, en Oiartzun (Guipúzcoa).

Allí, tras cambiarle las placas de matrícula, cargaron en él, entre otros objetos, dos cajas con 32 kilos de amosal y amonal, una escopeta, cuatro granadas y detonadores eléctricos y pirotécnicos.

Posteriormente, Zabala y Rodríguez Cordero emprendieron viaje a Madrid en dos vehículos pero, al llegar a Amorebieta (Vizcaya), el segundo de ellos, que iba por delante, divisó un control de la Guardia Civil, por lo que su compañero abandonó el vehículo cargado en el kilómetro 800 de la autopista Bilbao-Behovia.

Sin embargo, la fiscal ha indicado que no ha podido acreditarse su participación en el robo del vehículo y el intercambio de matrículas, pero la tenencia y el depósito de armas están, en su opinión, "claras", no sólo porque el propio acusado lo ha reconocido sino porque ya ha sido juzgado por ello en Francia.

Santesteban fue juzgado en el Tribunal especial de lo Criminal de París por cargos de asociación de malhechores con fines terroristas y tenencia de armas y explosivos, y condenado en marzo de 2007 a 10 años de cárcel, que se fundieron con los 9 años de prisión de le impuso en 2003 el Tribunal Correccional parisino.

Según la fiscal, ambas sentencias se refieren a dos periodos concretos -entre 1997 y 2000-, por lo que ha rechazado que se aplique la excepción de "cosa juzgada" porque ninguno de los fallos se refieren a los años en que ocurrieron los hechos que le imputa.

"Einstein" ha admitido a su defensora que fue miembro de la banda terrorista desde 1985 hasta que fue detenido en 2000 y que, durante la mayor parte de ese periodo -en concreto, desde 1988 hasta 1999-, vivió en casa de su mujer en la localidad del País Vasco francés de Ziburu, donde instaló un taller electrónico.

Por ello, su letrada ha considerado probado que el nunca salió de su domicilio de Ziburu, por lo que ha insistido en que Santesteban ya fue condenado en Francia por estos hechos.

Zabala y Rodríguez Cordero han exculpado a Santesteban y han afirmado que sólo ellos dos formaban un aparato dedicado a la sustracción de vehículos.

El ex responsable del aparato logístico de ETA, Joseba Arregi, ha coincidido con los dos anteriores en que era "imposible" que Santesteban pudiera traspasar la frontera en alguna ocasión, ya que se encontraba en situación de busca y captura.

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