La Fiscalía pide excarcelar a otros dieciséis etarras y un GAL

  • La Fiscalía ha pedido hoy excarcelar a otros dieciséis etarras y un miembro de los GAL en cumplimiento de la sentencia del Tribunal de Estrasburgo que anuló la retroactividad de la doctrina Parot, que de quedar en libertad sumarían un total de 58 terroristas fuera de prisión, 52 de ellos etarras.

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Madrid, 26 nov.- La Fiscalía ha pedido hoy excarcelar a otros dieciséis etarras y un miembro de los GAL en cumplimiento de la sentencia del Tribunal de Estrasburgo que anuló la retroactividad de la doctrina Parot, que de quedar en libertad sumarían un total de 58 terroristas fuera de prisión, 52 de ellos etarras.

Entre los dieciséis etarras destacan el miembro del "comando Vizcaya" Javier Martínez Izaguirre, alias "Javi de Usánsolo", condenado por el atentado que costó la vida al niño de tres años Fabio Moreno, así como Jesús María Mendinueta, alias "Manu", que asesinó a un guardia civil en presencia de su niño de nueve años.

Entre los terroristas cuya excarcelación ha apoyado la Fiscalía, que podría dictar la Audiencia Nacional en las próximas horas, figuran también la del matrimonio formado por Ignacio Fernández de Larrinoa y Miren Gotzone López de Luzuriaga, que suman entre los dos condenas superiores a cien años de cárcel por cuatro atentados perpetrados entre 1987 y 1989.

Están condenados por cinco asesinatos de agentes de las fuerzas de seguridad y por el atentado en 1989 en la casa cuartel de la Guardia Civil en Llodio (Álava).

Otro de los que serán excarcelados será José Ángel Biguri Camino, quien también cumple condena desde 1989 por su participación en este atentado contra el cuartel de la Guardia Civil de Llodio.

La Audiencia Nacional también excarcelará al ertzaina Santos Berganza Zendegi, colaborador de la banda terrorista y condenado por el atentado cometido en julio de 1987 contra los depósitos de combustible de CAMPSA en Rivabellosa (Álava).

Otro de ellos es Ignacio Erro, integrante del "comando Donosti", condenado por el atentado contra una patrulla de la Policía Nacional en la variante de Loyola (Guipúzcoa) de la N-I, perpetrado en junio de 1987.

A estas excarcelaciones se suma la de la etarra del "comando Vizcaya" Inmaculada Pacho, que cumple condena entre otras cosas por la colocación en 1990 de un coche bomba en la comisaría de Burgos, que quedó destruida y 45 personas tuvieron que ser atendidas de diversas lesiones.

Dos de ellos, Andoni Muñoz de Vivar y Kepa Solana Arrondo, se acogieron a la llamada "vía Nanclares", mediante lo que se apartaron de una u otra forma de la disciplina de la banda terrorista.

El resto de peticiones son para Nicolás Francisco Rodríguez, Juan Andrés Urquizu Ormazabal, Ignacio Orotegui Ochandorena, Iñigo Akaiturri Irazabal, Juan Ignacio Delgado Goñi y Bautista Barandalla Iriarte.

Finalmente, el miembro de los GAL cuya redención de pena apoya la Fiscalía es Ismael Miquel Gutiérrez, jefe del comando de este grupo que asesinó a un ciudadano francés en 1985 al confundirle con un etarra.

La Fiscalía da su aprobación a esas 17 excarcelaciones en otros tantos informes, todos ellos iguales, remitidos a las secciones que les condenaron, que serán las que decidan sobre su puesta en libertad.

En los escritos pidiendo la excarcelación, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Jesús Alonso, concluye que conforme a lo acordado por el Tribunal Supremo, que avaló la ilegalidad de la doctrina Parot, "se proceda actuar en consecuencia y se acuerde la puesta en libertad" de estos presos.

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