La fiscalía presenta acusación contra Lieberman por un caso de abuso de poder

  • La Fiscalía del Estado israelí presentó hoy la acusación contra el exministro de Asuntos Exteriores y líder del partido ultranacionalista Israel Beitenu, Avigdor Lieberman, al que acusa de "fraude" en un caso de abuso de poder que le mantendrá apartado por ahora del cargo de ministro.

Jerusalén, 30 dic.- La Fiscalía del Estado israelí presentó hoy la acusación contra el exministro de Asuntos Exteriores y líder del partido ultranacionalista Israel Beitenu, Avigdor Lieberman, al que acusa de "fraude" en un caso de abuso de poder que le mantendrá apartado por ahora del cargo de ministro.

El acta de acusación fue entregada a primera hora en un juzgado de primera instancia de Jerusalén, después de que la fiscalía reforzara sus sospechas con el testimonio del que fuera su viceministro, Dani Ayalón, informó la edición electrónica del diario Yediot Aharonot.

Lieberman dimitió hace dos semanas tras conocer que la fiscalía tenía intención de llevarlo a juicio por el nombramiento de Zeev Ben Arie como embajador en Letonia, supuestamente como recompensa por haberle filtrado información reservada.

La Fiscalía sostiene que Ben Arie, siendo embajador en Minsk años antes, alertó a Lieberman de la existencia de un requerimiento de información policial israelí a las autoridades judiciales de Bielorrusia en una investigación inconclusa al ministro por blanqueo de dinero.

Según la fiscalía, que cerró el expediente por blanqueo por falta de pruebas, Lieberman convocó a su viceministro y presidente de la comisión de nombramientos en el servicio exterior, Dani Ayalón, para darle instrucciones precisas antes de la reunión en la que se aprobó el controvertido nombramiento.

"Le convocó a su oficina y le dijo que tenía que nombrarlo embajador en Letonia", refiere el acta de acusación, en el que se subraya que Ayalón ni siquiera conocía a Ben Arie.

El caso contra el jefe del partido ultraderechista Israel Beitenu llevaba años en los titulares de la prensa local, hasta que a mediados de este mes la Fiscalía israelí anunció que procedería a acusarlo formalmente.

Lieberman, que se presenta a las elecciones del 22 de enero como segundo del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, en la lista conjunta Likud Beitenu, dimitió inmediatamente para tratar de cerrar el caso mediante un acuerdo fuera de los tribunales antes de los comicios.

Hace unos días, después de que Ayalón fuese apartado de la lista de candidatos de su partido, la Fiscalía anunció de forma inesperada que reanudaba las pesquisas y el jueves redactó un nuevo pliego de acusación con el viceministro como principal testigo de cargo.

Ayalón, que para muchos comentaristas buscaba vengarse de Lieberman, corroboró a los investigadores que había recibido instrucciones precisas para hacer aprobar el nombramiento del mencionado embajador.

Hasta entonces, los investigadores apuntalaron el caso judicial con pruebas circunstanciales y los testimonios de funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores que aseguraron que "el espíritu del comandante (Lieberman)" se filtró a todo lo que ocurría en pasillos y oficinas.

La apertura del proceso judicial con el testimonio de Ayalón supone un duro golpe para las aspiraciones políticas del ex ministro, que espera ser número dos del próximo Gobierno de Netanyahu.

Las encuestas realizadas desde que ambos políticos aunaron fuerzas en octubre indican que la lista Israel Beitenu obtendrá al menos 33 diputados, lo que garantizaría a Netanyahu que el presidente Simón Peres le entregue a él, y no a otro político, el mandato para formar Gabinete.

Su inmediato perseguidor, el Partido Laborista, sólo obtendría 19 escaños, y no contaría tampoco con los apoyos necesarios de otros grupos parlamentarios en la cada vez más derechizada sociedad israelí.

Según el acuerdo político alcanzado con Netanyahu, Lieberman podrá escoger el cargo que desee en el Gobierno que forme después de las elecciones y será además viceprimer ministro.

Posibilidades ambas que se verán truncadas por la apertura del proceso judicial ya que las normas legales israelíes impiden a un político ocupar el cargo de ministro mientras hay abierta juicio contra él.

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