La ONU pide mayor atención a la situación humanitaria en Chad y Sudán

Naciones Unidas.- El subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, John Holmes, pidió hoy que se preste una mayor atención a la situación humanitaria en Chad y Sudán, donde la combinación de una larga sequía y la violencia pueden causar una crisis humanitaria.

El máximo responsable humanitario de Naciones Unidas, que acaba de regresar de un viaje a la región, describió un complicado panorama en una de las zonas más conflictivas de África.

En la zona fronteriza del este de Chad siguen en campamentos improvisados más de 170.000 desplazados internos y unos 250.000 refugiados sudaneses huidos del conflicto en el vecino Darfur.

"Lamentablemente, no parece que los refugiados vayan a regresar a Darfur pronto, al menos hasta que haya una resolución (del conflicto), y no parece que estemos cerca de ello", explicó en una conferencia de prensa Holmes.

El diplomático británico, que el jueves se reunión a puerta cerrada con el Consejo de Seguridad, señaló que las perspectivas de regresar a sus lugares de orígenes son mayores para los chadianos desplazados internos.

En gran parte lo atribuyó a la estabilización de la zona fronteriza, tras la mejora de las relaciones entre Yamena y Jartum, aunque hay cierta incertidumbre sobre lo que pueda pasar tras la próxima retirada de la misión de la ONU en la zona (Minurcat) a petición del Gobierno chadiano, dijo.

Además, este país africano también afronta una situación humanitaria comprometida en su región occidental, enclavada en el Sahel, donde la escasez de lluvias a finales del año pasado ha aumentado los niveles de malnutrición.

"Esta situación es preocupante y ya he llamado la atención de los países donantes sobre lo que está ocurriendo", indicó.

En cuanto a Darfur, Holmes lamentó que la situación no ha mejorado mucho pese al proceso de paz en Qatar entre el Gobierno y la mayor parte de los grupos rebeldes.

Todavía hay unos dos millones de desplazados internos alojados en campos, siguen dándose combates en ciertas áreas y se han vuelto a producir secuestros de cooperantes, agregó.

La situación es también grave en el sur de Sudán, donde dijo que el fracaso de las cosechas a causa de la sequía ha puesto en peligro la seguridad alimentaria de cerca del 40 por ciento de la población.

Además, se suma a ello los episodios de violencia entre clanes, que en los últimos meses se han cobrado 700 vidas, y la presencia de los sangrientos rebeldes ugandeses del Ejército de Liberación del Señor (LRA).

"Nos dirigimos hacia una crisis, por lo que tenemos que afrontar esta situación cuanto antes", advirtió Holmes, quien lamentó que la ONU solamente hayan recibido hasta la fecha el 26 por ciento de los fondos que ha solicitado para financiar sus operaciones humanitarias en el sur de Sudán.

El responsable humanitario resaltó que una crisis humanitaria sería "difícilmente el mejor telón de fondo" para la celebración el próximo enero en esa región de un referéndum de autodeterminación.

La consulta forma parte del acuerdo de paz que en 2005 puso fin a 20 años de guerra entre el norte y el sur de Sudán, en los que murieron dos millones de personas.