La policía tailandesa ha anunciado este sábado la detención de un sospechoso del atentado perpetrado el pasado 17 de agosto en Bangkok que costó la vida a una veintena de personas y dejó heridas a decenas más en uno de los ataques más letales de la historia del país.
Esta es la primera detención, doce días después de la masacre. El atentado destruyó el santuario de Erawan, situado en el corazón comercial de la capital. "El sospechoso se parece al que estábamos buscando", ha declarado el portavoz Prawut Thavornsiri tras la redada efectuada esta mañana en un apartamento del norte de la capital, donde el individuo ha sido detenido.
En el piso, además, se han hallado "posibles materiales para la fabricación de explosivos".
"Es muy probable que esté involucrado en el ataque", ha dicho el general Chaktip Chaijinda, jefe adjunto de la Policía Nacional. "Encontramos decenas de pasaportes en su habitación", ha dicho el funcionario.
"Todavía no podemos decir si él es el hombre del retrato", elaborado a partir de imágenes de video vigilancia de un hombre sospechoso de haber colocado la bomba, dijo el Chaktip General.
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