La revista de alfonso guerra alerta contra los "populismos oportunistas"


La revista 'Temas', cuyo Consejo de Redacción preside Alfonso Guerra, alerta en su último número contra los "populismos oportunistas", y los señala como responsables, junto a la corrupción o la marginación del Parlamento, como factores de riesgo para la democracia española.
En un editorial titulado "Los riesgos de regresión democrática", la revista enumera "circunstancias" que están afectando por igual a la calidad de la democracia: los intentos de romper el consenso en materia electoral, la marginación del Parlamento tanto estatal como autonómico, la corrupción y los populismos oportunistas que se alimentan del catastrofismo y anatemizan a la política.
Recuerda que la democracia comporta requisitos institucionales de naturaleza jurídica y requisitos sustantivos o materiales. Cuando se dificulta la acción del Parlamento o se remodela el sistema electoral para beneficiar a un solo partido, alerta, "se quiebran los fundamentos institucionales, jurídicos, de la democracia".
"Pero cuando se hace creer que en la sociedad están separados los políticos (una `casta´ que se alimenta de la sangre `popular´) y el resto de los ciudadanos, se está atacando los fundamentos materiales, políticos, de esa misma democracia". "En España, hoy, la democracia está en riesgo de regresión por la quiebra combinada de fundamentos institucionales y materiales".
En el editorial, se acusa al PP de intentar romper el consenso electoral, y lo señala como "primer riesgo de erosión de la democracia porque es particularmente grave".
Lo mismo ocurre, asegura, al "marginar" al Parlamento con la "continua utilización" de los decretos-ley, uno por cada dos leyes, "un fraude constitucional, porque no es imaginable que haya una situación de extraordinaria y urgente necesidad cada mes".
Sobre la corrupción, considera "posible" que ahora haya un grado menor que en otras épocas, "pero la sociedad española ahora no admite el menor atisbo que haga pensar que una persona con responsabilidades públicas se ha beneficiado singularmente de sus funciones públicas".
"Tenemos motivos", asegura, recordando los casos que afectan a Jordi Pujol, a los consejeros que utilizaron tarjetas opacas de Caja Madrid, al PP por la trama `Gürtel´, a Iñaki Urdangarin, los ERE de Andalucía o a la ex vocal del CGPJ Mercé Pigem. Ante todo ello, Rajoy explica en el Congreso de los Diputados unas iniciativas "que ya son insuficientes y se cree que ya no hay nada más que hacer".
Finalmente, prosigue, al socaire de los problemas provocados por el Gobierno, "un nuevo partido nos dice que la democracia está secuestrada por una casta, olvida que existen derechas e izquierdas y ofrece fórmulas mágicas para cambiar, nada menos, que este régimen".
"También dicho grupo pone en riesgo la democracia porque deslegitima la Constitución y amenaza con destruir el modelo de convivencia democrática y pacífica a la que habíamos llegado, con la bandera de un ultra-izquierdismo que puede arruinar la economía. Y eso que por no tener, aún no tienen ni un concejal".
El artículo asegura que este "grupo extremista" se sitúa en la línea de Artur Mas, que se ha "inventado un falso `derecho a decidir´ con el que quiere lanzar a los catalanes a una confrontación abierta con el resto de los españoles. ¿Para qué? ¿Para que gobiernen en Cataluña las cien familias que se han acostumbrado a ocultar su patrimonio en Andorra?".
En este escenario, concluye, "las auténticas fuerzas de izquierda tienen que impulsar políticas creíbles y rigurosas de regeneración democrática y de asentamiento de los principios y valores propios del Estado de Derecho, denunciando y poniendo coto a aquellos que desprecian las conquistas de la democracia y a los que buscan atajos y trampas para mantener una hegemonía que están perdiendo, y que solo adquirirá legitimidad suficiente si se basa en el respeto a procedimientos políticos claros, contrastados y equilibrados".

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