La UE defiende su ayuda financiera a la Autoridad Palestina

Bruselas, 16 jun.- Los países de la Unión Europea (UE) defendieron hoy la ayuda financiera que prestan a la Autoridad Palestina (AP) pese a las "dificultades" que presenta su gestión, entre otros motivos por la falta de relaciones entre los Veintiocho y el movimiento islamista Hamás.

La ayuda canalizada a través del programa europeo de ayudas financieras a la Autoridad Palestina (PEGASE) se ha implementado "con éxito a pesar de las difíciles circunstancias", defendieron los socios europeos en unas conclusiones aprobadas hoy sin discusión en el Consejo europeo de Agricultura.

Apuntaron asimismo que "la complejas y difíciles circunstancias de la cooperación europea con la AP teniendo en cuenta el contexto de ocupación israelí, que la AP no tiene aún poderes de gobierno estatal y debido a que parte del territorio palestino ocupado, la franja de Gaza, está gestionado de facto por autoridades con las que la UE no tiene relaciones políticas", en referencia a Hamás.

"Los procedimientos financieros establecidos son robustos y no hay evidencia de corrupción, mala gestión o desvío de fondos", recalcaron los Veintiocho, que sin embargo se mostraron dispuestos a revisar algunos aspectos del programa de financiación para rentabilizar al máximo posible estas ayudas.

Además, los ministros remarcaron la importancia de seguir respaldando económicamente a los civiles de la franja de Gaza que no pueden trabajar debido a la situación política, para poder mantener la presencia de la Autoridad Palestina y la de sus trabajadores en esta zona.

Los países responden así a un informe publicado en diciembre por el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea que cuestiona la sostenibilidad del PEGASE, que aportó mil millones de euros en financiación para los territorios palestinos ocupados entre 2008 y 2012.

La Corte concluyó que el programa necesita mejoras en la gestión de los fondos, que se destinan esencialmente a ayudar a la Autoridad Palestina a pagar salarios, pensiones y subsidios, así como a mantener los servicios públicos y mejorar las finanzas públicas.

Por otra parte, los Veintiocho también mostraron su respaldo a la Tercera Conferencia para la prohibición de minas anti-persona que tendrá lugar del 23 al 27 de junio en Maputo.

La UE y sus Estados miembros son los que más dinero aportan para combatir esta práctica, en concreto 500 millones de euros desde la última conferencia en Cartagena (Colombia), lo que representa más de un tercio del total de la ayuda financiera mundial.

Los Estados miembros recalcaron que un total de 89 millones de euros de fondos europeos se destinaron en los últimos años a Afganistán para hacer frente a este problema.