Rosario reunió el valor este verano para denunciar a su pareja. Tenía hasta una orden de alejamiento, pero el aparato de teleasistencia, para su protección, aún no había llegado cuando un domingo por la noche su pareja se saltó la orden de alejamiento y acabó con su vida.
La historia de Rosario lamentablemente se sigue repitiendo en España. En apenas 10 meses ya han fallecido 55 mujeres víctimas de la violencia de género, las mismas que perdieron su vida en todo el año pasado.
34 de estas mujeres seguían conviviendo con su maltratado y sólo 13 se atrevieron a denunciar a sus parejas o ex parejas por maltrato e, incluso, una de ellas retiró su denuncia.
Cuando murieron a manos de sus parejas nueve de ellas tenían medidas que supuestamente les protegían de sus maltratadores. Sus verdugos quebrantaron estas medidas sin su consentimiento en la mayor parte de los casos.
Sigue sin ser suficiente que sólo 11 de las víctimas solicitaran estas medidas y que sólo se le concediera a nueve de ellas.
La mitad de estas víctimas tenía entre 21 y 40 años cuando perdieron su vida.
En Andalucía, la comunidad con más víctimas, aunque también es la de más población, por el momento los maltratadores han matado a una mujer más que el año pasado. Lo mismo ocurre en Castilla-La Mancha.
Sin embargo, destacan los casos de Asturias, donde en 2009 no se produjo ningún caso y en los diez primeros meses de este año ya han muerte cinco mujeres. En Aragón también se ha pasado de ninguna fallecida a dos, mientras que en Castilla y León de una víctima a cuatro hasta octubre de 2010.
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