Las autoridades electorales de Irak están satisfechas con los preparativos

  • Bagdad.- La Comisión Electoral de Irak afirmó hoy que el proceso previo a los comicios del próximo domingo "va sin problemas hasta ahora", y se mostró satisfecha con el desarrollo de los preparativos, en la recta final de la votación.

El Gobierno iraquí abrirá 18 colegios electorales en el vecino Irán
El Gobierno iraquí abrirá 18 colegios electorales en el vecino Irán

Bagdad.- La Comisión Electoral de Irak afirmó hoy que el proceso previo a los comicios del próximo domingo "va sin problemas hasta ahora", y se mostró satisfecha con el desarrollo de los preparativos, en la recta final de la votación.

El domingo se elegirá en Irak un nuevo Parlamento del que saldrá la coalición gobernante. La votación se desarrollará en medio de un fuerte dispositivo de seguridad por el temor de que grupos terroristas cumplan amenazas iniciales de boicotear el proceso.

"Hemos terminado toda la preparación para esta elección, dentro y fuera de Irak", dijo en una entrevista con Efe el vicepresidente de la Comisión Electoral, Qasim al Abudi. "Todo va sin problemas hasta ahora", agregó.

Irak llega a las elecciones parlamentarias al final de un complejo proceso político marcado por diferencias sobre la ley electoral, la distribución de los escaños que corresponden a cada provincia y hasta por la fecha de la votación.

Más recientemente, las divisiones se han centrado en la prohibición de medio centenar candidatos a diputado por supuestos vínculos con el régimen de Sadam Husein.

Hubo tres fechas sucesivas para la votación, hasta dejarla finalmente en el 7 de marzo, fuera de plazo fijado por la Constitución aunque, según Al Abudi, "todo está en armonía con la Constitución" y tanto el Parlamento como la Corte Suprema han dado su luz verde.

A las urnas están convocados 18,9 millones de iraquíes, que podrán votar en unas 50.000 urnas instaladas en unos 9.000 centros de votación distribuidos dentro del país y en otras 16 naciones donde hay emigrantes iraquíes.

Al Abudi informó de que todos los materiales para la votación, incluyendo las papeletas, las urnas y la tinta indeleble, ya han llegado a Irak, a la espera de que ser distribuidos en los distintos centros de votación.

"También hemos superado los problemas de financiación, y nos ha llegado ya todo el dinero que necesitábamos para cubrir todos los gastos", añadió el integrante del consejo de la Alta Comisión Electoral Independiente.

Al Abudi cifró en 180 millones de dólares la financiación que se ha necesitado para esta votación.

Esta será la tercera vez que se elige un Parlamento en Irak desde que fue derrocado el régimen de Sadam Husein. Primero fue designada una Asamblea Constitucional, en enero del 2005, y en diciembre del mismo año se votó para conformar un nuevo Parlamento.

Pero los retos de este año son mayores, porque, entre otras cosas, hay listas abiertas, que permitirán a los electores optar por un partido o alianza política o por determinado candidato, dentro de las cuotas asignadas para las 18 provincias.

A los comicios se presentan unos 6.000 aspirantes, agrupados en alianzas electorales o grupos políticos. El primer ministro, Nuri al Maliki, es uno de los favoritos, pero los analistas piensan que no tiene garantizada una victoria en las urnas.

El proceso electoral estuvo marcado en los últimos meses por las divergencias que surgieron después de que una comisión dedicada a extirpar de la política iraquí a antiguos representantes del régimen de Sadam Husein pidiera que se retiraran un total de 511 candidatos.

En esa lista había tanto suníes como chiíes, pero las figuras políticas más importantes a las que se les prohibió participar eran suníes, lo que puso en duda la limpieza de un proceso en un país y una clase política de mayoría chií.

Una revisión posterior permitió presentarse a 26 candidatos, y a otros 145 les fue confirmada la prohibición. Acerca del resto, sin embargo, la decisión ha quedado para después de los comicios, en caso de que los incluidos en la "lista negra" sean elegidos.

Aunque dirigentes políticos auguran que este tema afectará de una forma grave el período posterior a las elecciones, Al Abudi no cree que pueda haber estallidos de violencia por las rivalidades políticas que puedan surgir.

"Todo se está desarrollando con pasos democráticos. Ahora todo el mundo ha dejado sus armas, y nadie genera violencia", añadió.

El reto de seguridad es uno de los más importantes. Estarán disponibles medio millón de policías y 14 divisiones del Ejército, que velarán para evitar que un grupo próximo a Al Qaeda cumpla sus amenazas de boicotear las elecciones.

Parte de esas medidas de seguridad reforzadas comenzaron a notarse hoy en el centro de Bagdad.

Por ejemplo, para acceder a la Comisión Electoral, situada en la llamada "zona verde" de Bagdad, a los siete controles de identidad habituales y los cuatro chequeos del cuerpo de cada visitante, se incorporó hoy un control más previo a 50 metros de la entrada principal para detectar explosivos pegados al cuerpo.

Mostrar comentarios