Los equipos con mujeres son más eficaces en la reeducación de maltratadores

  • La presencia de mujeres en los equipos de reeducación a condenados por delitos de violencia de género mejora los resultados de estos cursos, pues, según la experiencia acumulada por la Audiencia Provincial de Alicante, la diversidad de género facilita la recepción de ideas y planteamientos.

Alicante, 16 nov- La presencia de mujeres en los equipos de reeducación a condenados por delitos de violencia de género mejora los resultados de estos cursos, pues, según la experiencia acumulada por la Audiencia Provincial de Alicante, la diversidad de género facilita la recepción de ideas y planteamientos.

Su presidente, Vicente Magro, a la vez responsable de la Oficina Judicial de Coordinación Institucional de la Audiencia, ha hecho hoy esta consideración, coincidiendo con el séptimo aniversario del primer curso de reeducación a condenados por delitos relacionados con la violencia de género que no deben ingresar en prisión.

Según ha expuesto, la experiencia en la conformación de equipos multidisciplinarios de intervención demuestra que estos equipos de trabajo, cuando están integrados de manera igualitaria por hombres y mujeres, son "más innovadores y productivos" que aquellos donde sólo participan hombres.

"Se rompe así la falsa, pero extendida creencia, de que la mujer no debe participar en los programas de reeducación de maltratadores", ha aseverado Magro.

Por ello, ha subrayado su apuesta por incluir mujeres como formadoras en los cursos de reeducación.

De acuerdo con la experiencia acumulada por los técnicos responsables de estos programas, Carmelo Hernández (psicólogo) y José Pablo Cuéllar (jurista), la diversidad de género en un equipo de esta naturaleza facilita "la recepción de ideas y planteamientos, ayudando a conformar un clima de trabajo más comunicativo".

Además, ambos consideran que la presencia de mujeres profesionales que intervienen en distintos tramos estratégicos de la reeducación de condenados "es más efectiva cuando se trabaja la asunción de la responsabilidad de estos, contribuyendo así a modificar pensamientos distorsionados y a evitar la reincidencia".

La participación de los condenados en estos programas es obligatoria, de ahí la importancia de motivar a los participantes para que valoren la utilidad y beneficio que puede aportarles su paso por el programa formativo de reeducación, ha dicho Magro.

En este sentido, Hernández ha afirmado que la diferencia de género en la conformación del equipo multidisciplinario de intervención "actúa positivamente como un factor de motivación, innovación y rendimiento del equipo", y así se está comprobando en las sesiones que imparten.

Según Cuellar, los condenados se sienten desarmados al inicio del curso cuando han de interactuar con una profesional y muestran una actitud de confrontación y resistencia.

Sin embargo, conforme el programa se desarrolla y avanza, "esa actitud inicial, generalmente, se va modificando y transformando en una nueva actitud participativa, que ayuda a que asuman su responsabilidad y planteen alternativas en sus vidas basadas en la no reincidencia".

Psicólogas, juristas y criminólogas son algunas de las profesionales que participan en estos cursos y son también las responsables de explicar a los agresores en persona "por qué el hombre debe respetar a la mujer", han añadido.

Mostrar comentarios