Lima, 12 oct.- Los equipos del fútbol profesional peruano se comprometieron hoy a asumir una serie de obligaciones, entre ellas la responsabilidad civil por los daños que puedan ocasionar sus hinchas, para frenar la violencia en los estadios y permitir el reinicio de la liga local.
Los dirigentes de los equipos suscribieron un Protocolo de Seguridad para Eventos Deportivos de Fútbol elaborado por el Ministerio del Interior tras la muerte de un hincha del Alianza Lima en el clásico del fútbol peruano, el pasado 24 de septiembre.
El protocolo, que también fue firmado por el ministro del Interior, Óscar Valdés, contiene una serie de obligaciones que serán una condición necesaria para que se autoricen los partidos del fútbol profesional.
"Estamos dando un mensaje claro a la ciudadanía de que no se puede tolerar más actos de violencia, y todos estamos comprometidos a devolverle la seguridad y la integridad a las familias que acuden a los estadios", señaló el viceministro del Interior, Luis Alberto Otárola, durante la suscripción del documento.
Entre las obligaciones, los equipos tendrán que contar con un seguro para los espectadores, que incluya como responsabilidad las cinco cuadras a la redonda del escenario deportivo, y durante cinco horas antes y cinco horas después de los partidos.
Asimismo tendrán que enviar cada tres meses a la Policía Nacional el registro de sus hinchas y evitar el desplazamiento de éstos en espacios públicos, así como suspender la entrega entradas gratuitas.
Los equipos también se comprometieron a asumir de manera solidaria la responsabilidad civil por las lesiones o los daños que puedan ocasionar los integrantes de sus barras el día del encuentro deportivo.
Además, la Federación Peruana de Fútbol, las Asociaciones Deportivas de Primera y de Segunda División y los clubes se comprometieron a sancionar al equipo que incumpla el Protocolo con la no programación del partido correspondiente.
El acuerdo estableció, también, que los propietarios y administradores de los estadios deberán instalar cámaras de vídeo, altavoces y sistemas de identificación personal en el escenario y elaborar un protocolo de seguridad específico.
Los propietarios de los palcos de los estadios deberán remitir a la policía la relación de los invitados a su propiedad 48 horas antes de los partidos, además de permitir el ingreso de policías y no consumir alcohol ni drogas.
El Ministerio del Interior remarcó que si no se ofrecen las condiciones de seguridad de un espectáculo deportivo o se incumple el protocolo, denegará la autorización o dispondrá que se juegue sin público.
El estatal Instituto Peruano del Deporte (IPD) se comprometió, por su parte, a no alquilar los estadios de su propiedad a los equipos que no cumplan con el protocolo y a nombrar un Comité Nacional Contra la Violencia en el Deporte.
El gremio de los futbolistas profesionales y la Sociedad Peruana de Radio y Televisión asumieron, a su vez, el compromiso de "promocionar la cultura de paz" en los partidos de fútbol.
El torneo peruano, que fue suspendido tras la muerte del hincha aliancista Walter Oyarce, se reanudará el próximo fin de semana en medio de estrictas medidas se seguridad, según informó la Asociación Deportiva de Fútbol Profesional (Adfp).
Un juzgado de Lima ha abierto un proceso por homicidio calificado y disturbios a cuatro sospechosos de la muerte de Oyarce, quienes permanecen encarcelados. EFE.
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