Los palestinos acusan a Israel de vulnerar el marco del proceso de paz

Ramala.- La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) acusó hoy al Gobierno israelí de haber vulnerado ya los términos del nuevo diálogo indirecto de paz, apenas un día después del anuncio de su lanzamiento.

Se trata del comienzo de las obras de preparación para un nuevo asentamiento judío en Jerusalén Este, aprovechando los propietarios del terreno un vacío legal que no les exige autorizaciones ni del ayuntamiento ni del Ejecutivo, revelado por el movimiento israelí Shalom Ajshav (Paz Ahora, en hebreo).

"Ésta es la primera violación y la primera vulneración de los términos como inicio de las negociaciones indirectas", dijo Yaser Abed Rabó, secretario general del Comité Ejecutivo de la OLP y uno de los principales asesores del presidente palestino, Mahmud Abás.

En declaraciones a la prensa, Abed Rabó aseguró que la OLP, representante legal del pueblo palestino, actuará para detener el nuevo proyecto porque no está dispuesta a que "las negociaciones sean usadas como tapadera para construir en las colonias" judías en los territorios palestinos ocupados de Jerusalén Este y Cisjordania.

Por ello, agregó, ha trasladado la protesta a Washington, que actúa como mediador en las conversaciones de paz, reanudadas la pasada semana tras dieciséis meses de parón negociador y que tienen una duración prevista de cuatro meses, antes de pasar a un formato cara a cara.

Ayer, el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Philip Crowley, advirtió de que exigirá a israelíes y palestinos que rindan cuentas si se embarcan en medidas contraproducentes para los esfuerzos de paz en la región.

"Si cualquiera (de las partes) toma medidas significativas mediante las conversaciones de proximidad que juzguemos dañarán seriamente la confianza, nos aseguraremos de que rindan cuentas y de que las negociaciones continúen", afirmó.

El proyecto que ha generado el enfado palestino es el embrión de la colonia judía "más grande" en medio de una zona densamente poblada por palestinos y constará en principio de 14 viviendas que aprovecharán la estructura de una vieja comisaría israelí, según Shalom Ajshav.

Al no requerir construcción alguna, sino meramente una remodelación del viejo inmueble, los propietarios de la vieja comisaría han comenzado los trabajos.

La comisaría fue evacuada hace dos años por la Policía, que se trasladó a otra zona ocupada en un acuerdo con los colonos.

Más allá de las primeras catorce viviendas, el proyecto en sí está pendiente de aprobación por el municipio desde el verano, y consta en total de unas 104 viviendas.

Una vez finalizado se unirá a otro, denominado Maale Zeitim, y se convertirá en el núcleo más grande de colonos judíos en medio de los barrios árabes de Jerusalén Este.

En esa circunstancia, unos 1.000 colonos judíos nacionalistas quedarían entre los 14.000 palestinos del barrio de Ras El Amud, rompiendo la continuidad territorial en esa zona.

Por presiones de Estados Unidos, Israel ha suspendido de facto la construcción en Jerusalén Este para no torpedear el incipiente proceso de negociaciones indirectas con los palestinos, anunciado ayer en Ramala por el jefe negociador de la OLP, Saeb Erekat.