Madrid. Zapata deja la concejalía de cultura por el dolor causado y lo que pueda afectar a su actividad


El ya exconcejal de Cultura y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, Guillermo Zapata, anunció este lunes que ha abandonado el cargo por el dolor causado por sus ‘tuits’ a personas “que no lo merecían”, que trasciende al debate sobre la libertad de expresión, y por la posibilidad de que la polémica pudiera “condicionar por completo la actividad que tiene que realizar” un responsable de este ramo.
En una rueda de prensa en el Consistorio, Zapata comenzó pidiendo perdón a las personas que hayan podido sentirse afectadas por sus ‘tuits’ de humor negro, razonando que, aunque éstos hubieran sido descontextualizados, “un determinado contexto no justifica generar dolor a nadie”.
El exconcejal añadió que esta mañana llamó al padre de Marta del Castillo y que en los próximos días tratará de dirigirse con “cartas estrictamente personales” también al resto de aludidos en sus mensajes para pedirles disculpas, admitiendo de antemano la “legitimidad absoluta” de que no se las acepten. Subrayó que “por supuesto” él no es antisemita, que rechaza “cualquier tipo de violencia” y que siente el “máximo respeto” por las víctimas del terrorismo independientemente de lo que se pueda pensar a partir de sus bromas.
Sobre el procedimiento de renuncia, explicó que esta mañana habló durante una hora con la alcaldesa, Manuela Carmena, y que le dijo que “los términos en que se había plantado este debate podía afectar a la tarea” que le iba a corresponder en la Concejalía de Cultura, porque el debate sobre lo que se puede decir o no decir puede por condicionar por completo la actividad” que le iba a tocar desarrollar. “Me parecía un ejercicio de responsabilidad quitarme de en medio”, enfatizó.
Zapata explicó que Ahora Madrid es “un proyecto colectivo” y “el protagonismo de uno no puede ponerse sobre el de los demás”, y que si la polémica podía generar complicaciones para el desarrollo de su proyecto cultural, era “razonable no ser la persona responsable” del área. Carmena lo aceptó. No dejará, en cambio, el acta de concejal, pues a su modo de ver es en este área donde podía afectar la polémica de sus tuits.
LIBERTAD DE EXPRESIÓN Y CONSECUENCIAS
El exconcejal aseguró que ha reflexionado mucho en las últimas horas, lejos de los medios de comunicación, y que ha concluido que “la libertad de expresión trata de lo que uno puede decir o no, pero no habla de las consecuencias, y uno tiene que asumirlas”. Más adelante, precisó que si el debate versara de opiniones política, él no habría dimitido. “Estamos hablando de dolor causado a personas que no lo merecían”, puntualizó.
La dimisión se limita al área de Cultura, no a su acta de concejal, puesto que le parece que es a la cultura y al ejercicio de la libertad de expresión a lo que podía perjudicar la polémica. "Nadie me ha invitado a marcharme, ha sido un proceso colectivo, aseguró. Reiteró que pide perdón a los aludidos en sus tuits y que él está en contra de toda violencia, y añadió que la libertad de expresión afecta a lo que uno puede o no decir, pero no a sus consecuencias, que tiene que asumir cada uno.
Zapata aseguró que no ha sufrido presiones para tomar esa decisión y que tampoco le han influido las peticiones de dimisión del resto de grupos municipales. Dijo que le parece “absolutamente normal” que sus tuits de hace años se vean sometidos a un “escrutinio” y también reconoció “perfecta legitimidad” a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para que le acusen de delito si lo considera oportuno.
A otra pregunta de los asistentes, Zapata afirmó que ya no protagonizaría escraches porque “un concejal tiene a su disposición mecanismos políticos para no tener que expresarse a través de un escrache”, pero que, si un ciudadano ve vulnerados repetidamente sus derechos “y no puede acceder a un diálogo institucionalidad, tiene toda la legitimidad del mundo” para hacerlos.
En esa línea, el concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, tachó de “obviamente reprobable” que algunos de los manifestantes que celebraron el sábado la investidura de Carmena ante el Ayuntamiento insultaran a concejales de Ciudadanos. Barbero, experto en tratar con víctimas del terorismo, dijo también que una de las cosas que han enseñado étas es a “diferenciar las conductas de las personas”, y en este sentido dijo que en Ahora Madrid conocen a Zapata y “su manera de estar en el mundo”, por lo que seguirán contando con él.
Zapata justificó que la alcaldesa, Manuela Carmena, no compareciera junto a él señalando que Ahora Madrid es un proyecto colectivo, por lo que indicó que hay que acostumbrarse a que no siempre será Carmena quien comparezca ante los medios de comunicación.

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