Frank Blanco: "Yo las uvas, como los niños, peladas y sin pepitas"

    • El presentador de 'Zappeando' asegura que el sueño de su vida era dar las Campanadas en televisión.
    • Nos cuenta si está nervioso, si es supersticioso y cómo ha pasado otras Nocheviejas.
Frank Blanco
Frank Blanco
Nuria Hernández

Frank Blanco está encantado con su importante tarea de dar las Campanadas en laSextaeste 31 de diciembre junto a Sandra Sabatés. "Era una de mis ilusiones", confiesa a Teinteresa.es

Hemos querido charlar con el presentador de 'Zappeando' sobre esta cita y cómo la vive él habitualmente a falta de poco más de dos semanas para la gran noche.

¿Cómo reaccionaste cuando te dijeron que dieras las Campanadas en laSexta?

No me lo esperaba. Recibí la llamada del director de laSexta cuando estaba grabando el spot de Navidad de Atresmedia. Pensé que me iba a hablar del programa pero no. Empezó a vendérmelo como si fuera una especie de marrón y al ver por dónde iba le dije: "Para, para, sí, cuenta conmigo". Es una de las ilusiones que yo tenía desde hace muchos años. Alguno pensará 'vaya pringao', pero creo que es una experiencia que pocos podemos vivir, sólo se hace una vez al año, no hay sitio para todos los presentadores… Estar ahí en directo haciendo lo que yo llevo viendo toda la vida por la tele, es mágico.

¿En tu casa qué te dijeron?

Mi chica, que es del gremio, lo entendió perfectamente. LaSexta por suerte me deja llevarme a mi mujer y a mis dos niños que son pequeños, así que no voy a estar solo. Cuando quede un cuarto de hora para las 12 les diré 'luego nos vemos', pero los tendré al lado.

Supongo que tener al lado a Sandra, que ya es experta, traquiliza…

Es lo que yo pensaba hasta que hablé con ella y me dijo "bueno, esto nunca se sabe, a veces no se oye bien..." ¡Y yo tenía mis esperanzas puestas en ella! Pero bromas aparte, sabe que ella ya las dio el año pasado sí que me da cierta tranquilidad.

¿Pero entonces sí que estás nervioso?

Sí. Por un lado está toda la energía que tengo porque me hace mucha ilusión, pero por el otro está la sensación de pensar 'venga, ¿seré yo este año el que la cague?'. Estoy convencido de que todos los que lo han hecho han ido con el pensamiento de voy a hacerlo bien, habrá ensayos… pero claro, luego hay como algún tipo de conjuro que hace que alguien la cague, así que estoy cruzando los dedos para no ser yo.

¿Y como seas tú?

Y si soy yo, yo que me paso el día riéndome de los demás, pues me tocará reírme de mí mismo, está claro.

Encima en tu programa te lo repetirían todo el rato…

Yo creo que cambiarían la careta de entrada y pondrían ese momento.

¿Tienes alguna superstición para esa noche?

No soy muy supersticioso. Tengo algunas tonterías. En Fin de Año lo que hago desde hace un tiempo es llevar ropa interior de color rojo. Pero lo hago porque como considero que hasta ahora he tenido suerte en la vida, digo, ¡a ver si no me la voy a poner y me empieza a ir mal! Es más porque no tengo nada que perder.

¿Las uvas te las comes peladas o sin pelar?

Esto es un mundo. Yo soy muy de menú infantil cuando voy a un restaurante. Con las uvas necesito que estén peladas y sin pepitas, ya preparadas. No me tomo unos Lacasitos de milagro. Tardé mucho en tomas uvas, el primer año sería con 16 años o por ahí, antes tomaba gominolas, ¡aceitunas tampoco porque no me gustan!

¿Eres de quedarte en casa o hacer un viajecito en Nochevieja?

Con niños los planes ya no son los que eran. Pero las navidades me gustan más en familia, con mi madre, hermanos, mi mujer... Un año las pasé en Nueva York porque me apetecía mucho pero, vamos, ni llegué a Times Square.

¿Recuerdas alguna Nochevieja como especial por ser la más divertida?

He estado muchos años sin celebrar la Nochevieja porque tuve la mala suerte de perder a mi padre y le enterramos un 31 de diciembre por lo que muchos años no han sido fechas muy gratas. Luego he aprendido a llevarlo y no hace muchos años empecé a celebrarlo de nuevo.

¿Vas a sorprender con un estilismo a lo Messi?

Estoy en ello. Lo que sé es que no quiero ir como uno más, así que es probable que arriesgue. No soy muy de arriesgar, pero una noche como esta, creo que algo hay que hacer. Ya estoy volviendo locos a los estilistas. Además, me ponga como me ponga, la gente va a mirar a Sandra Sabatés.

¿Te comerás las uvas antes o después de darlas?

Mi idea es comérmelas en directo mientras las estoy cantando. Voy a estar como media España. ¿Quién es capaz de estarse callado en esos momentos? Eso que nos enseñan de no hablar con la boca llena nos lo saltamos todos en los primeros segundos del año. Así que yo quiero hacer lo mismo que va a hacer la gente en su casa que es decir 'Feliz Año Nuevo' con las uvas aún en la boca. Te digo más, creo que yo suelo llegar a la novena uva cuando han terminado las doce campanadas, me las acabo después (risas). Algún año con muchas dificultades he llegado pero mi vida ha corrido peligro (risas).

¿Tú dónde solías ver las Campanadas?

Las míticas de Ramón García las he visto algún año. Luego he ido variando. Recuerdo haber visto en laSexta y en Cuatro. También vi en un pueblo perdido de Asturias las de Belén Esteban. Aquel año estaba en un hotel rural y todos querían verlas en La1, yo hacía 'Anda ya' y tenía que ver las de la Esteban porque todo el mundo las iba a comentar. Así que obligué a todos a que se tragaran ese momentazo.

¿Recuerdas algún momentazo de las Campanadas en televisión?

Claro, me acuerdo del de Carmen Sevilla y las de Marisa Naranjo, que son insuperables.

A lo mejor tú las superas este año…

Igual digo: 'Feliz 2014 a los espectadores de Telecinco" (risas). Que últimamente ando muy loco, que no sé ni dónde estoy (risas).

¿Cuál es tu deseo y tu propósito para 2014?

Mi deseo es que haya segunda temporada de 'Zappeando', voy ya mirando a futuro. Y mi propósito es perder unos kilitos, con algo de dieta y saliendo a correr, que no soy de gimnasio. En 2013 no he hecho filtro con la comida…

¿Sueles cumplir lo que te propones?

No todos. Pero creo que voy al 50%, estoy por encima de la media. Hace tres años me propuse dejar de fumar y lo hice; hace dos, perder peso y lo perdí… pero luego lo gané. De cada dos, fallo en uno.

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