Copenhague, 25 abr.- El Tribunal de Apelación de Escania y Blekinge ratificó hoy la condena de cadena perpetua a Peter Mangs, el "francotirador de Malmö", culpable de varios ataques con disparos entre 2003 y 2011, la mayoría contra inmigrantes.
La sentencia le reconoce culpable de dos asesinatos y ocho intentos de asesinato, tres más que en el fallo dictado en noviembre pasado por un tribunal de primera instancia de Malmö.
Al igual que en el primer fallo, se considera también determinante el análisis técnico de las armas encontradas en casa de Mangs y las balas y casquillos hallados en el lugar de los crímenes.
"Apelación constata que los delitos son de tal gravedad que otra consecuencia que la cadena perpetua no puede considerarse", consta en la sentencia difundida hoy.
Mangs, de 40 años, había sido declarado culpable en julio de 2012, pero la duración de la pena quedó supeditada al resultado de un examen psiquiátrico, que determinó más tarde que no padecía ningún transtorno mental grave en el momento de cometer los delitos.
La Fiscalía, que pedía además una condena por otro asesinato y varios intentos de asesinato, sostenía que Mangs, en prisión preventiva desde su detención en noviembre de 2010, actuó por motivos racistas y por un odio hacia los delincuentes tras la muerte de su hermana por sobredosis y varios asaltos sufridos por su madre.
La defensa pedía su absolución y puesta en libertad al considerar que no se ha demostrado que el acusado estuviera en los escenarios de los ataques o fuera el autor de los disparos.
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